23 de marzo de 2023

La historia del asalto al Banco de España de Oviedo en octubre de 1934

La confesión de Pilar González
Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
Lo relacionado con el dinero interesa a todos, principalmente cuando afecta a la economía particular y el euro de cada casa, pero también a muchos nos apetece conocer en el aspecto histórico, lo que pasó con el dinero o los billetes que un día cambiaron de sitio en medio de la violencia y las revoluciones

Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
La Nueva España.
Sobre la aventura del oro del Banco de España tras la Guerra Civil se ha escrito un montón, en cambio de lo ocurrido tras el robo de la delegación de la misma entidad en el Oviedo de octubre de 1934 casi no se habla porque todo parece más claro, pero hoy les voy a contar aquí un caso curioso que evidencia que en este asunto también se pasó página demasiado rápido. Les explico el porqué. A las 7 de la mañana del día 7 de octubre de 1934 la revolución de los mineros asturianos iniciaba una de sus acciones más controvertidas con el asalto al edificio del Banco de España en Oviedo en una maniobra supervisada por Ramón González Peña. La resistencia en el interior fue tan enconada que en la noche del día 9 hubo que utilizar una pieza de artillería para cañonear la fachada suroeste mientras se lanzaba una batería de bombas de mano por la posterior. 

22 de marzo de 2023

Los primeros asturianos frente a la invasión árabe de los años 713-714

Últimos visigodos o primeros asturianos: las fortificaciones defensivas de La Carisa y La Mesa
El Reino que nació en Asturias-Gaspar Meana. Gaspar Meana González (Tremañes, Gijón, 1960), es un dibujante, ilustrador y escritor asturiano que escribe en lengua asturiana. Fuente: Wikipedia.

Las clausuras halladas en Teverga y Lena hablan de la defensa organizada por los grupos aristocráticos del centro de la región frente a la invasión musulmana de 713, antes de la revuelta de Pelayo
El Reino que nació en Asturias-Gaspar Meana. Gaspar Meana González (Tremañes, Gijón, 1960), es un dibujante, ilustrador y escritor asturiano que escribe en lengua asturiana. Fuente: Wikipedia.
La Nueva España
¿Cuál fue la resistencia de los primeros asturianos frente a la invasión árabe de los años 713-714? Las fortificaciones defensivas halladas en La Carisa y La Mesa serían el reflejo de esa resistencia, organizada por los grupos aristocráticos que habitaban el centro de la región, quienes levantaron esas clausuras con sus tropas y campesinos dependientes. Ésa es la tesis que planea en este artículo el arqueólogo Jorge Camino, responsable, con Yolanda Viniegra y Rogelio Estrada, de las excavaciones de estas estructuras defensivas. En los artículos históricos sobre el nacimiento del Reino de Asturias, publicados por el diario La Nueva España con motivo de la celebración de su 1.300 aniversario, Javier Rodríguez Muñoz incluyó un amplio comentario dedicado a las llamativas fortificaciones de El Homón de Faro y El Muro que, respectivamente, cierran la comunicación por las vías romanas de La Carisa y La Mesa, los principales accesos al centro de Asturias a través de la Cordillera y que, junto con los arqueólogos Yolanda Viniegra Pacheco y Rogelio Estrada García y con financiación de Cajastur, tuve la oportunidad de investigar tratando de aquilatar su correspondencia con la conquista romana.

21 de marzo de 2023

Asturianos que hicieron las Américas

Así lucían el dinero los indianos
Grabado del vapor transatlántico Reina María Cristina en el año 1893, que transportaba emigrantes a Cuba y México desde Gijón. Imagen coloreada (Modo: envejecido). (...). La Voz de Asturias.

Sólo una pequeña parte de los asturianos que emigraron en el éxodo de finales del XIX consiguieron hacer las Américas y construirse una mansión al regresar
Fiesta de emigrantes asturianos con un gaitero en Berisso, Puerto de la Plata (Argentina), 1916. Aportación: Museo del Pueblo de Asturias. Foto coloreada (Modo: envejecido). (...). Saber más... Memoria Digital de Asturias.

El Mundo - Magazine.
En ellas vivieron rodeados de comodidades, como auténticos nuevos ricos. Entre 1870 y 1930, más de 300.000 jóvenes se marcharon de Asturias y cruzaron el océano Atlántico en busca de una vida mejor. La mayoría eran adolescentes, incluso niños menores de 17 años, edad tope para poder librarse del servicio militar. “Cuando mi padre tenía 15 años fue andando desde Luanco a Gijón (que distan 13,5 kilómetros entre sí), acompañado por mis abuelos. Él, que iba delante, no paraba de llorar”, relata Inés Mori, hija de José María Mori, un luanquín que hizo fortuna en Cuba. Corrían tiempos de penuria. Son cientos los episodios que ilustran tanto el esfuerzo económico como el trauma familiar que suponía un viaje de ultramar. “Mi bisabuelo, Juan Fernández Bao, marchó con 14 años y fue andando hasta Santander (a 173 kilómetros), para embarcar. Hacía calma, el barco de vela no pudo salir y tuvo que regresar a su pueblo. A su familia, que había hecho un gran sacrificio para pagar la travesía del muchacho, no le hizo ninguna gracia, y casi le echaron de casa”, rememora Juan Álvarez Corugedo.

20 de marzo de 2023

Los últimos astures libres

La irreductible aldea gala estaba en León
Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
Lancia, la última ciudad de Hispania que resistió a los romanos, será visitable incluyendo las zonas que están bajo los viaductos de la autopista A-60
Reconstrucción idealizada de Lancia. Álvaro Nogal. El País.
El País.
"Estamos en el año 25 antes de Jesucristo. Toda la Hispania está ocupada por los romanos… ¿Toda? ¡No! Una aldea poblada por irreductibles astures resiste todavía y siempre al invasor". No es el inicio del famoso cómic de Astérix, el galo. Es una historia real. La ciudad se llamaba Lancia y se situaba a 15 kilómetros en línea recta de León (el antiguo campamento de las Legio VI Victrix y la Legio Vll, que dieron lugar a la actual capital de la provincia). Este espectacular yacimiento, de unas cien hectáreas de extensión, lleva desde 1996 siendo excavado por los arqueólogos entre los actuales términos municipales de Villasabariego y Mansilla Mayor. El complejo histórico de los últimos astures libres cuenta, además, con una gran ventaja: se encuentra adyacente a la A-60, la autovía que une Valladolid con León. Más de 50.000 piezas arqueológicas han sido desenterradas en las campañas de investigación que se han desarrollado sobre la última ciudad de Hispania que resistió a las legiones romanas, según los textos históricos. Tras la conquista de este oppidum (ciudad levantada sobre una colina) que ocupaba unas 30 hectáreas, y la posterior construcción sobre él de un asentamiento romano, el emperador César Augusto ya pudo decir que ninguna ciudad en la provincia más occidental del imperio se resistía a su poder.

19 de marzo de 2023

Del maíz a la «magia» del ferrocarril

Mieres, al tren

El concejo de Mieres fue creado como tal en el año 1.836, si bien comenzó oficialmente su existencia el día 1 de Enero de 1.837. Saber más… Ayuntamiento de Mieres.

En 1872 Mieres era todavía una "aldeona", o dos, para ser exacto, pegadas a la montaña y separadas por un kilómetro de la carretera que habían abierto en el siglo I los dominadores romanos y que apenas había sufrido alteraciones desde entonces
Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
La Nueva España
Las costumbres y la forma de vida también llevaban siglos sin inmutarse. Aunque una parte importante de su población ya trabajaba en los hornos de la fábrica perteneciente al francés Numa Guilhou o en las minas de carbón que la abastecían, el tono familiar seguía dependiendo de lo rural. Todas las familias complementaban su salario con lo que obtenían de la agricultura, e incluso el maíz que se sembraba en la inmensa vega que ocupaba el valle constituía todavía el principal sustento de muchas. La vega era parte de su existencia, y por eso saltó la alarma cuando se conocieron las pretensiones de aquellos señoritos que habían llegado desde Oviedo y que la recorrían deteniéndose cada poco para señalar a un lado y a otro mientras gesticulaban y tomaban notas en sus cuadernos.

18 de marzo de 2023

Las organizaciones de resistencia de los trabajadores en el siglo XIX

Los Orígenes del Sindicalismo y las Organizaciones Obreras
Mitin en Mieres el 1º de mayo, hacía 1914. Foto archivo.
Las primeras manifestaciones de la conflictividad obrera y el surgimiento de las organizaciones de resistencia de los trabajadores fueron en Asturias relativamente tardías, como consecuencia de la lentitud característica del proceso industrializador y de la propia formación de la clase obrera
Trabajadores de la Mina 'Poca Cosa', en L'Agüeria San Xuan de Mieres, hacía 1920. (Archivo; Marino Canga). Foto Archivo.
El blog de Acebedo
Tras los logros limitados del Sexenio democrático y el retroceso en la primera etapa de la Restauración, en los años 90 del siglo XIX, se inicia un lento resurgir, convertido en verdadera eclosión en torno al cambio de siglo. El fuerte impulso de las organizaciones obreras tras 1898 (en su doble vertiente, socialista y anarquista) suscitará una intensa ofensiva patronal que, tras inferir severas derrotas a los trabajadores, anulará muchos de sus logros anteriores, hasta que, en el paso de la segunda década del siglo XX, se consoliden estructuras sindicales más sólidas y sobre nuevas bases. Una de las consecuencias sociales más significativas de la industrialización fue sin duda el surgimiento de las protestas obreras, relativamente espontáneas y desarticuladas al principio, más organizadas después. Este fenómeno se manifestó, en todo caso, con formas e intensidades diferentes en cada país o región.

17 de marzo de 2023

El valor estratégico del carbón en la Asturias de 1914

“La Gran Guerra”, la contienda que encumbró a Asturias
Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
El estallido de la primera conflagración bélica mundial, impulsó la economía asturiana y alumbró un sueño de prosperidad que duró cuatro años (1914-1918)
Recorte de prensa de "EL Noroeste sobre el conflicto bélico. La Nueva España.
El estallido hace más de cien años de la I Guerra Mundial (24 de julio de 1914 - 14 de noviembre de 1918)llevó a los países contendientes a la devastación, y una oleada de desolación, muerte y destrucción recorrió Europa; pero la llamada Gran Guerra abrió uno de los períodos más lucrativos y fastuosos de enriquecimiento en las naciones que, como España, se mantuvieron neutrales. Asturias y las regiones industriales punteras alcanzaron cotas de encumbramiento desconocidas, sus tasas de producción y empleo generaron una corriente de prosperidad vertiginosa, y las clases dirigentes vivieron un raudo y descomunal proceso de acumulación capitalista excepcional. Las grandes fortunas de la burguesía carbonera y metalúrgica asturiana, con conexiones con los ferrocarriles, las navieras, los astilleros y la banca, multiplicaron sus patrimonios. La codicia sobre el carbón, que reforzó su valor estratégico, y la especulación de precios que alimentó el conflicto como consecuencia de la entrada en guerra de los grandes productores hulleros (Gran Bretaña, Bélgica, Francia, Alemania y otros).

16 de marzo de 2023

La violencia política en este país tuvo y tiene género, tuvo clase, y tiene Historia

El rencor de las mujeres feas o la venganza de las chicas Topolino
Tras la derrota del nazismo, las chicas “topolino” se convirtieron en el reflejo edulcorado del machismo. Incluso en los inocentes anuncios sobre remedios para el dolor de cabeza se transmite un mensaje que hoy resultaría inaceptable: la familia siempre supeditada al padre. (...). Saber más... Magazine El Mundo.

El título de este artículo no es mío: se lo he robado a José Vicente-Puente, un personaje gris o, más bien, diría azul oscuro, que fue propagandista de Falange y cronista del Madrid de los primeros años de posguerra, y terminó sus días pasados los ochenta yéndose de copas y chicas con Francisco Umbral, que es un camino bastante natural para este tipo de personajes
Imagen incluida en el libro “Mujeres en pie de guerra. Memorias de nosotras (Ediciones B)”. Fuente: Público.

Público.
El caso es que Vicente-Puente usó esa frase, "El rencor de las feas" para titular una crónica que escribió en el diario franquista Arriba dos meses después de la victoria golpista en la Guerra Civil en 1939. En ella volcaba un retrato cargado de odio de las mujeres republicanas, en el que, con la sangre del frente todavía fresca, quiso dejar claro el destino que le esperaba a las perdedoras y a quienes la derrota arrastró con ellas. En la prosa de Vicente, que no era sino la ideología de todo un régimen, quedaban varias cosas claras: la más obvia, la repulsión y la profunda inquina que le producía el hecho de imaginar una mujer politizada, una mujer activa, una mujer ocupando un espacio público más allá de la iglesia o la cocina. Milicianas o maestras, estudiantes o diputadas, todas ellas eran, a ojos del nacionalcatolicismo, una repulsiva anomalía que debía ser eliminada. "Junto a la ínfima mujer, que se subió a los camiones para detener a los nacionales en la Sierra y confundió la batalla con una dominguera excursión de pan y tortilla, ha existido la pedante intelectual de izquierdas, la estudiantilla fracasada, la empleada envidiosa del jefe".