En mayo de 1938 un comando republicano liberó a 308 compañeros que estaban presos en el fuerte de Carchuna

Los héroes langreanos de Carchuna

Ilustración de Alfonso Zapico

En mayo de 1938, un comando republicano liberó a 308 presos en el fuerte granadino; la operación la lideraron tres vecinos del concejo

El fuerte granadino de Carchuna. J. RODRÍGUEZ MUÑOZ. https://www.lne.es/noticias-suscriptor/cuencas/2019/07/02/heroes-langreanos-carchuna/2496700.html

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He tardado en abordar esta historia por el respeto que me impone resumir en una página su grandeza que ya ha inspirado numerosos artículos e interesado a historiadores de prestigio como el mierense Javier Rodríguez Muñoz; pero aún tiene pendiente un buen libro que la aborde e incluso una película para acercarla hasta el público más joven. De cualquier forma era inevitable que acabase trayéndola a esta página, ya que sus protagonistas fueron hombres de nuestras cuencas mineras y es bueno que todos recordemos su hazaña. En mayo de 1938 un comando republicano liberó a 308 compañeros que estaban presos en el fuerte de Carchuna, situado a unos cien metros de la línea de costa granadina, cerca de Motril. La operación fue impulsada por cuatro tenientes asturianos, y tuvo una gran repercusión porque debido a sus características la Delegación de Propaganda y Prensa del Gobierno de la República se encargó de sacarle un buen rendimiento propagandístico publicando dos meses más tarde el folleto titulado "Fuerte de Carchuna".

Ilustración de Alfonso Zapico

Este fue un movimiento lógico porque la acción además del éxito indiscutible que supuso la propia liberación de los presos y su traslado hasta zona segura, constituyó un hito para la estrategia del ejército del pueblo, que recompensó con la medalla del deber a los máximos responsables de la misión, Luis Bárzana, jefe de 71.ª División, y Ramón Pedrosa, jefe de la 55.ª Brigada. Veamos ahora los hechos. El fuerte de Carchuna, al otro extremo de la Península, fue escogido tras la caída del Frente Norte como penal preferente para internar a combatientes derrotados en Asturias, que fueron trasladados hasta allí y destinados a trabajar abriendo una carretera y una pista de aterrizaje para los vencedores, pero cuatro de los internados -hombres de acción que ya habían llegado a la guerra civil curtidos por la revolución de Octubre- no se resignaron al cautiverio y tomaron la decisión de evadirse para volver a rescatar a todos sus camaradas. Resulta evidente que tomar esa decisión no fue fácil ya que requería de un conocimiento previo de las instalaciones y los movimientos de una guarnición mandada por un alférez e integrada por varios sargentos y más de veinte soldados; además había que valorar las posibilidades de poder llegar hasta las líneas amigas sin ser capturados y sobre todo asegurar el silencio del resto de los detenidos y su colaboración tanto en el momento de la fuga como en el del rescate posterior.

(…). El castillo de Carchuna (Granada) fue levantado en 1777 junto a la playa para defender la zona de los ataques piratas y reconvertido en penal de trabajos forzados por el bando fascista durante la guerra civil española. Allí fueron llevados tres centenas de presos republicanos asturianos, pues se daba por hecho que, algunos de ellos bregados en las minas, eran perfectos para el trabajo duro de acondicionar los alrededores del castillo como pista de aterrizaje de la Legión Cóndor. (…). https://www.elperiodico.com/es/sociedad/20180328/la-pelicula-de-la-operacion-carchuna-de-los-malditos-bastardos-de-la-guerra-civil-espanola-paso-a-paso-6722664

Los cuatro comprometidos dormían separados, cada uno en un barracón, lo que les permitió coordinar y controlar a la vez el comportamiento de los otros presos, y al menos tres de ellos eran jóvenes del Nalón: Joaquín Fernández Canga apenas tenía 22 años, había trabajado como mecánico en su vida civil y adquirido su formación militar en la Escuela Popular de Guerra de Santoña; era de Sama, como Secundino Álvarez Torres, minero de 23 años. Junto a ellos, el tercer implicado fue Cándido Adolfo Muriel López, un chofer que había trabajado como taxista, afiliado a la CNT de La Felguera e, igual que los otros, teniente tras haber pasado por una academia militar. El cuarto se llamaba Esteban Alonso García y todo indica que también podía ser vecino de las cuencas puesto que había sido minero. Joaquín fue el encargado de diseñar la ruta de la huida, para lo que se encargó de ir elaborando un mapa del terreno que veía en las salidas de trabajo, hasta que todo estuvo dispuesto, y a las seis de la tarde del 19 de mayo, los cuatro se evadieron de la fortaleza, en una maniobra de despiste que los llevó a dar un rodeo antes de tomar la dirección correcta y llegar después de seis horas hasta la posición de la 55ª Brigada, donde fueron recibidos primero con la lógica cautela y una vez comprobada su identidad con enorme emoción entre vivas a Asturias y a la República.

La más audaz misión de comandos de España durante la Guerra Civil. Video. https://www.elperiodico.com/es/videos/opinion/la-operacion-carchuna-durante-la-guerra-civil/4375892.shtml

Para comprender como se pudo realizar la fuga sin que los guardianes se diesen cuenta y también porque es de justicia, debemos mencionar en este punto que algunos de los sargentos de la guarnición de Carchuna, entre ellos uno llamado Rafael Guerrero Rodríguez, eran de corazón republicano y no solo estaban al tanto del plan sino que se jugaron la vida al no pasar lista aquella noche y esperar a la mañana siguiente para dar parte de lo sucedido a sus superiores. Una vez a salvo, los tenientes siguieron adelante con su compromiso y comunicaron el plan al jefe de la 71.ª División, el también asturiano Luis Bárzana, quien no dudó en apoyar la acción prevista para lo que dispuso un comando heterogéneo formado por treinta hombres, entre los que había soldados de la 55.ª Brigada, guerrilleros almerienses y dos miembros de la brigada Lincoln: Irving Goff y William "Bill" Aalto, entrenados para operaciones especiales. Y por supuesto los cuatro valientes, que aceptaron ponerse bajo el mando de este último. "Bill" Aalto era un hombre que sobrepasaba los dos metros de altura, poeta, homosexual y comunista, que luego combatió en la II guerra mundial y al que su partido quiso convertir después en el principal protagonista de la acción de Carchuna aduciendo que fue él quien la planteó para liberal a su camarada Alex Kunslincht, que creía preso en aquella fortaleza, desconociendo que ya había sido fusilado.

Ilustración de Alfonso Zapico

Según esta versión el papel de los tenientes langreanos se habría limitado a actuar como simples informadores, pero sabemos que no fue así, aunque es verdad que sin la experiencia del gigante americano todo habría sido más difícil. Volviendo a la operación militar, se decidió que el comando se acercase por mar en dos barcas a motor, una mandada por Bill, acompañado por Joaquín Fernández Canga, y la otra por el teniente José Fernández Rodríguez, también asturiano, repartiendo a los hombres entre ambas embarcaciones. Hubo un primer intento fallido y finalmente a las diez de la noche del 23 de mayo, partió una sola motora atada a otra lancha de remos con el grupo dividido entre las dos, que pudo llegar al faro Sacratif, el punto previsto para el desembarco. Allí echaron pie a tierra mientras las barcas volvían a puerto seguro y después de dejar algunas bombas de mano en una chabola del lugar, cortaron los cables de teléfono y avanzaron hacia la fortaleza repartidos en grupos mandados por los tenientes asturianos que avanzaron silenciosamente y en fila de a uno. Así lograron sorprender y desarmar sin disparos a los centinelas de la puerta principal e ir reduciendo a los demás para llegar hasta las habitaciones del alférez y de los sargentos. El alférez se rindió sin resistencia mientras que para reducir a los sargentos fue necesario lanzar una bomba, pero en pocos minutos la situación ya estuvo controlada.

Ilustración de Alfonso Zapico

Lo que sucedió a continuación ya se ha comparado alguna vez a una escena de la conocida película "Malditos bastardos", que no sé si han visto ustedes y tiene por protagonistas a un comando de judíos que se venga con saña de los nazis que van encontrando en su camino. Tras el asalto de Carchuna los presos identificaron a los guardianes con peor fama del fuerte -tres sargentos y el cabo furriel- que fueron fusilados sin ningún miramiento, y con ellos el alférez, detenido cuando intentaba huir para no ser llevado al paredón. Una vez libres, los asturianos se repartieron las armas que había en el fuerte y las bombas escondidas, que lógicamente resultaron insuficientes para todos, pero bastaron para sostener un choque con la Guardia Civil del puesto de Calahonda, en el que salieron victoriosos, aunque con dos muertos, uno de ellos Joaquín Díaz Loredo, otro langreano que sumar a los vinculados con este episodio. Al mismo tiempo, según el plan dispuesto por Luis Bárzana, sus hombres iniciaron un tiroteo en el punto por el que los fugados debían cruzar el frente para dejarles el paso expedito. 

YouTube. Videoclip de la BSO del documental "Operación Carchuna, 1938" con la música original del concierto de Francisco Doblas a la guitarra. (…). Una audaz acción guerrillera republicana durante la Guerra Civil Española: Operación de rescate en el Fuerte de Carchuna (Motril, Granada, 1938). (…). https://www.youtube.com/watch?v=B7BgoEFBSJg

Tras el final de la guerra de España intentó borrarse esta historia que resultaba humillante para los vencedores y luego el tiempo fue llevándose a los testigos, por lo que resulta difícil completar todos sus detalles. Afortunadamente Joaquín Fernández Canga vivió hasta el siglo XXI y pudo dar su testimonio en entrevistas a la prensa; también lo hicieron otros langreanos que fueron protagonistas de esta odisea, como Pepín Fernández Rodríguez, Marcelino Díaz Fernández o Sócrates Menéndez González. A la vez en alguna biografía escrita por descendientes de aquellos presos se amplían algunos datos, pero este episodio todavía no está cerrado. De cualquier forma, Honor y Gloria a nuestros paisanos.

Libro regalado por la autora. Marie Fernández al administrador del Blog de Acebedo: “POR “LAS HUELLAS DE LA GUERRA CIVIL“ A mi padre, asturiano oficial de la República. Marie Fernández, nació en Francia, donde reside en la actualidad. Marie es Traductora-Intérprete  de Francés – Español – Inglés. Es hija del asturiano Joaquín Fernández Canga (protagonista del libro), de Sama de Langreo. Para más información, ver artículo del Blog: https://elblogdeacebedo.blogspot.com/2018/10/la-verdadera-historia-de-la-escapada.html

FUENTE: ERNESTO BURGOS-HISTORIADOR. Artículo publicado por La Nueva España el 02-07-2019. Ver enlace: https://www.lne.es/noticias-suscriptor/cuencas/2019/07/02/heroes-langreanos-carchuna/2496700.html

Con ilustraciones de Alfonso Zapico.

Ernesto Burgos Fernández (historiador). Nació en Mieres (Asturias) el 7 de julio de 1957. Historiador, columnista y biógrafo, éstas son algunas de las facetas de un Ernesto Burgos que rescata con talento personajes y anécdotas de nuestra historia. Un notorio investigador y gran divulgador. Licenciado en Geografía e Historia por la Universidad de Oviedo (1979). Diploma de Estudios Avanzados en Arqueología Histórica («La romanización en las cuencas mineras del sur de Asturias» 2006). Profesor de Educación Secundaria, ha trabajado en los institutos «Juan de Herrera» (Valladolid), «Sánchez Lastra» (Mieres), «Camino de La Miranda» (Palencia), «Valle de Aller» (Moreda) y desde 2006 en el IES «Mata Jove» de Gijón. En el año 2016 el reconocido historiador mierense fue distinguido con el reconocido galardón anual de “Mierense del año”. Secretario General de Izquierda Republicana en Asturias (1992-2002); miembro fundador del Partido por la III República (P3R) y actualmente vicepresidente del Ateneo Republicano de Asturias. Coautor de los libros de texto «Entre amigos» (Conocimiento del Medio) para Asturias y Cantabria (2002); coordinador de la revista de Ciencias Sociales «Cuadernos de Mieres» (2001-2002); experto en la cultura y la historia de las cuencas mineras asturianas. Ha impartido varios cursos sobre el patrimonio arqueológico de Aller, Lena y Mieres y defendido ponencias sobre su temática en jornadas y congresos. Desde los años 70 escribe desinteresadamente artículos para numerosas publicaciones, álbumes y periódicos locales (Esquisa, Mieres 30 días, La Voz de Ujo, Camín de Mieres, Mieres, El Carbón, Por tierras del Caudal, Aula de Paz…). Ha sido pregonero en las fiestas de Santa Bárbara (2002); La Teyerona (2006); San Xuan de Mieres (2007) y Santa Cruz (2011). Histórico militante republicano. Secretario General de Izquierda Republicana en Asturias (1992-2002); miembro fundador del Partido por la III República (P3R) y actualmente vicepresidente del Ateneo Republicano de Asturias. Biógrafo de los revolucionarios mierenses Manuel Grossi Mier («Cartas de Grossi». 2009) y Jesús Ibáñez («Y el verbo se hizo furia». Semana Negra 2010), también ha prologado a varios autores asturianos. Colaborador del diario asturiano La Nueva España, donde ha firmado las series: «El patrimonio de Las Cuencas» (1998-2000); «100 años de historias y andanzas» (2000-2002) y «Los personajes de nuestra historia» (2003-2004). Desde febrero de 2005 mantiene ininterrumpidamente la página semanal «Historias heterodoxas». FUENTE: http://www.elvalledeturon.net/historia/autores/ernesto-burgos

Alfonso Zapico (Blimea, Asturias, 1981). Historietista e ilustrador freelance. Profesional gráfico desde el año 2006. Trabaja en proyectos educativos del Principado de Asturias (Aula Didáctica de los Oficios) e impartido talleres de ilustración en centros educativos de Asturias y Poitou-Charente (Francia).  Realiza ilustraciones, diseños y campañas para diversas agencias de publicidad, editoriales e instituciones. Es ilustrador de prensa en diarios regionales asturianos (La Nueva España, Cuenca del Nalón, Les Noticies…).  Se estrena en 2006 con un álbum de corte histórico para el mercado franco-belga, La guerra del profesor Bertenev (Dolmen, 2009). Su primer trabajo publicado directamente en España es Café Budapest (Astiberri, 2008), donde se mete de lleno en una ficción determinada por los orígenes del todavía no resuelto conflicto palestino-israelí. Acto seguido apuesta por recrear en cómic la vida de James Joyce, Dublinés (Astiberri, 2011), que gana el Premio Nacional del Cómic 2012 y a raíz del cual surge el cuaderno de viaje La ruta Joyce (Astiberri, 2011).  Vive en la localidad francesa de Angouléme, donde, tras realizar El otro mar (Astiberri, 2013) a caballo de su Asturias natal, a la que vuelve con regularidad, se encuentra preparando su nueva y ambiciosa obra, “La balada del norte”, que constará finalmente de tres tomos.  Esta magnífica obra es un autentico tesoro de la novela gráfica española y refleja la negrura de los valles mineros de Asturias de los que surgen personajes luminosos, y bajo el ruido atronador de las minas de carbón se escucha el susurro de una canción antigua. Los viejos y nuevos tiempos chocan brutalmente poniendo a prueba al protagonista, pronto a la Humanidad entera. Éste es el sonido de "La balada del norte". Sus libros han sido traducidos al inglés, francés, alemán o polaco. (…) http://alfonsozapico.com

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