La travesía del capitán Ochoa en
el favorita
En 1869 el bergantín "Favorita" - capitán Son Rafael Ochoa, construido en nuestro astilleros de Llera y tripulado por luarqueses- vino de Filadelfia a Luarca en 17 días. Fue la más rápida travesía del Atlántico, no superada por ningún otro velero de cualquier época o país. Imagen. |
Ilustración de Alfonso Zapico.
Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista
e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con
el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa
obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA. |
Antes de que un asturiano fuera campeón del mundo de velocidad automovilística (paradójicamente en una época en la que el Gobierno, tan bondadoso como intervencionista, pretendiendo hacernos a todos virtuosos, aspira, entre diferentes afanes, a suprimir la velocidad) otro asturiano batió un récord de velocidad al atravesar el océano Atlántico en un tiempo extraordinariamente corto, entre el 21 de agosto al amanecer, que zarpó del puerto de Filadelfia, en los Estados Unidos de Norteamérica, y el día 7 de septiembre de 1869, que dio vista al puerto de Luarca, a la atardecida. No podemos insinuar que se tratara de una hazaña deportiva, ya que el bergantín «Favorita», que la realizó, hacía un viaje regular de barco mixto de carga y pasaje, y además, en aquella época, las personas serias no perdían el tiempo en competiciones deportivas. Si algo se hacía era porque había que hacerlo, no para hacerlo antes o más rápido que otros, que es el principio que anima el reto deportivo y por el que, sin alejarnos de nuestros límites geográficos, don Pedro Pidal escaló el Naranjo de Bulnes, un picacho al que no subía nadie, porque como le explicó antes de acometer la escalada su guía Gregorio El Cainejo, a nadie se le había perdido nada allí. Todavía, si se tratara de ir a buscar una res o a cazar un rebeco...