Proyectaron historias, ahora son
historia
|
El cine-teatro Capitol de Mieres (Derribado) |
La
consejería de Cultura asturiana, incluye 24 cines de distintas localidades del
principado en el Inventario del Patrimonio Cultural de Asturias por su valor
arquitectónico pero, más aún, por el reflejo de una forma de sociabilidad y
ocio que atravesó el siglo XX
|
Cine Esperanza en Teodoro Cuesta de Mieres. Foto Alonso. (Se mantiene el edificio, pero, en estado ruinoso) |
Durante décadas contuvieron historias en
forma de sonido e imagen; ahora ellos mismos son y cuentan una parte de la
historia de Asturias en el siglo XX y por eso gozarán oficialmente, de protección. El Boletín Oficial del Principado de Asturias acaba de
publicar la Disposición por la cual 24 de los supervivientes de la era dorada
del cine en el Principado pasan a formar parte del Inventario de Patrimonio
Cultural de Asturias. Se les reconoce no solo su valor intrínseco como
edificios, sino también muy especialmente su papel crucial en la vida cotidiana
de unas décadas convulsas en las que Asturias, como el resto del mundo, empezó
a abrirse al primero de los grandes medios del entretenimiento de masas: una
forma de ocio (y más tarde de cultura y de educación sentimental) que empezó en
barracones de feria y acabó en edificios que buscaban envolverse en una arquitectura
a menudo también ella misma espectacular, y a veces también en un barniz de
prestigio que acogió los rasgos de las distintas modas y estilos
arquitectónicos de un siglo en el que se sucedieron casi tan vertiginosamente
como la propia evolución de las costumbres.
|
El teatro-cine Novedades en calle Guillermo Schultz de Mieres. (Desaparecido) |
El 16 de abril de 2015, Cultura
seleccionaba medio centenar de cines y los proponía a la consideración de
entidades como la Universidad de Oviedo, el RIDEA, la Comisión de Urbanismo y
Ordenación del Territorio o la Real Academia de la Historia. Después de sus
respectivos informes, y después también de las alegaciones que señalaron los
irrecuperables o los imposibles de mantener, los cines finalmente seleccionados
para pasar a formar parte del tesoro patrimonial asturiano fueron:
Otros 12 quedaron fuera después de las alegaciones, pero el Principado ha
recomendado a sus respectivos municipios que emprendan algún tipo de medida de
protección.
|
Cine Espina Olloniego |
Todos ellos reúnen cualidades
suficientes para ser acogidos bajo una figura de protección que viene a
reconocer su servicio a la «sociabilidad del ocio» de generaciones de
asturianos y sus características distintivas respecto a otro tipo de edificios
del patrimonio regional, tanto en su fisonomía como en sus funciones. Los 24
edificios protegidos tienen eso en común: acogieron proyecciones
cinematográficas. Y en todos los casos también su estructura incluye por una
serie de elementos invariables.
|
Cine parroquial Riocastiello de Piñeres Aller |
Todos tuvieron fachadas especialmente
remarcables por un motivo u otro -elementos que buscaban convertirse en un
reclamo y en un rasgo urbanísticamente distintivo-; y tuvieron taquillas, salas
y cabinas de proyección, vestíbulos, dependencia de uso mixto... pero a partir
de ahí, fueron tan distintas como lo prueba el catálogo elaborado por encargo
de la consejería de Cultura por los historiadores del arte María Fernanda
Gutiérrez y Roberto Álvarez Espinedo, historiadores del arte. Una variedad que
se incrementa recordando los que tampoco llegaron a tiempo de estar en esta
lista de rescatados. Las variantes son muchas.
|
Cola del cine Royalty de Figaredo. (Mieres) |
Los hubo con palcos, como en el
Patagonia de Miranda. Los hubo que acomodaron la pantalla contra la fachada
principal, con acceso por detrás y por debajo, como el Cervantes en Figueras.
Otros buscaban profundizar en el efecto de perspectiva haciendo converger los
muros sobre la pantalla, como Teatro Cine Capitol de Mieres, o incluso
organizaban las butacas y la pantalla no en perpendicular a su entrada, sino en
paralelo a la vía pública (el Teatro Cine Josefina de San Esteban de Pravia, La
Llama de Santa Cruz, Cine Maxi en Pola de Laviana, cine Europa en A Caridá...)
Los años enriquecieron los edificios donde se ubicaban los cines, que
compartieron contenedor con otros usos comerciales (el Ayala o el Hernán Cortés
de Gijón).
|
Cine Ayala. Oviedo |
Del mismo modo, pasaron de lo que era poco más de una barraca (el
teatro Estman de Sama, que aguantó hasta 1945) a enriquecerse y crecer en los
años 20 en los que, bajo la influencia madrileña de Teodoro de Anasagasti,
empezaron a involucrar a arquitectos de renombre. En los años siguientes, los
Busto padre e hijo, Marqués Castelar, López Negrete, Juan Vallaure, los
hermanos Somolinos, y no pocos promotores, se persuadieron de que merecía la
pena buscar en los cinematógrafos el empaque y el prestigio.
|
Cinema Copeval en Turón. Mieres. (El blog del Mierense) |
La demanda
creciente hizo que los cines crecieran constantemente en volumen hasta el
inicio de su decadencia, a finales de la década de los sesenta. No siempre eso
se compaginó con el cuidado constructivo o la calidad arquitectónica; los años
de posguerra forzaron austeridad. Pero, mientras se pudo, el cine fue también
un reflejo del gusto cambiante de las clases dominantes, con un factor de
innovación y decorativismo que era más fácil que encajase en este tipo de
edificaciones que en las de otras construcciones.
|
Teatro Clarín en Soto del Barco |
Según enumera la memoria
incluida en la Declaración, hubo en Asturias cines adscribibles a las
corrientes eclécticas, las neoclásicas (Clarín de Soto del Barco, Pabellón de
Figueras), decó (Jovellanos); regionalistas (Heleinas en Boal, Casa del Pueblo
de Moreda, Vital Aza de Pravia); racionalistas (San Andrés de Turón, Esperanza
de Mieres, Peñalba de Sebares); arquitectura oficial (Riera de Villaviciosa).
|
Cinema San Andrés. (San Andrés de Turón). El blog del Mierense |
Del mismo modo, las salas asociaron sus
proyecciones a otro tipo de funciones en el mismo edificio, como el teatro y el
casino en Navia o en el Casino de Lieres. Y reflejaron, como no podía ser menos
en un siglo como el XX; distintos sesgos ideológicos. Hubo cines parroquiales cuando
la iglesia posconciliar buscó aggiornamento y captación de nuevos feligreses
que fuesen también nuevos públicos (el Piñeres en Aller o en Ciaño junto al
templo de San Esteban) y en los edificios de los sindicatos franquistas (el
Cine Hogar del Productor en Sama o en la Casa Sindical Comarcal de La
Felguera).
|
Cine Sindical La Felguera |
Más tarde, ya en la decadencia, vinieron los multicines en el centro
de la ciudad y finalmente, en el exilio de los suburbios comerciales. De todos ellos, solo la joya del Prendes
de Candás sigue siendo a la vez historia y proyectando historias en su
interior. Como recoge el documento de Declaración, es ya «el único
cinematógrafo histórico conservado en su estado original y en suso de
Principado y que demuestra las características propias de su tiempo e diseño,
materiales y composición». Una última resistencia al The End final del cine
histórico en Asturias.
|
Teatro-Cine-Prendes. Candas. |
FUENTE:
JUAN CARLOS GEA
_________________________________________________________________________
_________________________________________________________________________
NOTA: Si te ha interesado
esta entrada y quieres preguntar, comentar o aportar algo al respecto, puedes
dejar un comentario o escribir a mi dirección de “correo del blog” con
la seguridad de ser prontamente atendido.
¡¡¡Difunde “El blog de Acebedo” entre
tus amistades!!!
Sígueme en:
·
§ - Twitter – “El
blog de Acebedo”
Es magnífico y muy interesante su blog. Lo consulto a menudo y siempre con provecho desde hace algún tiempo. La variedad de temas que toca, lo bien documentado que está su trabajo....:le agradezco muy personalmente su rigor y amenidad. Un saludo.
ResponderEliminar