Aliatar, el mensajero que llegó de Oviedo
Dibujo antiguo de los Reyes Magos |
Si los de la Guerra
fueron tiempos duros para todos, aún más lo fueron para los niños, testigos
mudos de la barbarie de las bombas, de la ausencia del padre y la muerte de los
hermanos por causas injustas, en general, e injustificadas, en particular, para
los más pequeños
Cuando acabó la contienda o, al menos, cuando acabó
parcialmente, cualquier intento de recuperar la normalidad de la vida cotidiana
sería liderado y deformado por los vencedores, que llegaron a politizar,
incluso, a los Reyes Magos. De toda aquella larga y difícil posguerra, empero,
no solo salieron cosas malas. ¿Alguna vez se ha parado a pensar el lector, por
ejemplo, cuál es el origen del mensajero real Aliatar y la razón de que, más
allá de los Picos de Europa, ese nombre (aunque árabe) suene a chino?