12 de mayo de 2022

Hace un siglo las mujeres tenían vetados la mayoría de los trabajos

El salario de una pizarrera
Mujeres escogiendo carbón en la zona de lavado. (…). «Las mujeres siempre trabajaron en el carbón. Aunque cuando se habla de minería se suele pensar en la extracción pura y dura dentro de los pozos, que es un trabajo muy masculinizado, ellas desarrollaron tareas como el lavado y escogido del carbón». (…). Saber más... El País.

Por doce horas de trabajo las mujeres que desarrollaban esta labor cobraban 1,25 pesetas, una tercera parte de lo que recibían los hombres
Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
La Nueva España
En las últimas décadas la lucha de las mujeres por conseguir la paridad con los hombres ha dado pasos de gigante, aunque todavía queda camino por recorrer antes de que la equivalencia en derechos sea absoluta. Una de las discriminaciones que aún persisten es la diferencia salarial en algunos empleos donde trabajando lo mismo hay diferente remuneración según el sexo de quien lo desempeñe. Hace un siglo la norma general era esta: las mujeres tenían vetados la mayoría de los trabajos, se les reservaban los peor pagados y para conseguirlos necesitaban la autorización de un varón que normalmente era su marido o su padre, por lo que muchas tenían que buscarse la vida al margen de las empresas. En el mundo minero su lugar estaba en los lavaderos de carbón, bien como escogedoras, cargadoras, cribadoras o pizarreras y en muchos casos simplemente como carboneras que ayudaban a la economía familiar rebuscando por libre en escombreras, cargaderos, vías ferroviarias o cualquier otro lugar en el que pudiese haber caído accidentalmente algún menudo con el que se atendía la cocina familiar o se sacaban unos céntimos en la venta ocasional.
(…). Ellas se ocupaban de manejar el dinero que entraba en casa para llegar a final de mes, cuidaron de los hijos e hijas, formaron piquetes durante las huelgas, crearon redes de apoyo y se mancharon las manos del carbón que también respiraron. (…) Saber más... eldiario.es

En el año 1900 los ingenieros del cuerpo de Minas Perfecto María Clemencín y Jesús M. Buitrago publicaron el libro “Adelantos de la siderurgia y de los transportes mineros en el norte de España” que ahora es una fuente indispensable para el conocimiento de la minería en aquel tiempo. Se trata de un resumen muy detallado de lo que anotaron después de haber recorrido en 1896 y 1897 las minas, fábricas, talleres y cargaderos de Asturias, León, Palencia, Bilbao y Santander. En lo que respecta a nuestras cuencas, el libro se ocupa de los planos inclinados de Carrerallana (Ujo), Turón, Baltasara y Mariana en el Caudal, y Ventura, Mariquita, Santa Ana y La Justa en el Nalón; los ferrocarriles mineros de Ujo, Turón, Mieres y El Peñón; la Fábrica de La Felguera, Compañía de Asturias y María Luisa; los talleres de Sovilla y el de Plan Estrada de la SHE, los de Turón, Baltasara.
Plano de “Mina Baltasara” en los Pontones de L'Agüeria San Xuan de Mieres. Año 1905. Color. Foto de Aquilino Polio. Archivo del Blog.
Nicolasa, El Peñón, Mariana, Santa Ana, La Justa, Mosquitera, Sama y María Luisa; los hornos de coquización de Mieres, La Felguera, Aller, La Justa y Turón; los Hornos Altos y de calcinación de Mieres y La Felguera y los de materiales refractarios de esta segunda villa; el taller de afino del arrabio de Mieres, la Fábrica de Turiellos y las de aglomerados y briquetas de Fábrica de Mieres, Sovilla, Ujo y Turón.
 
Por si esto fuese poco, los ingenieros también aportaron en su trabajo valiosas informaciones sobre las construcciones que se estaban levantando en La Felguera, Ujo, Turón y Mieres incluyendo el poblado de Bustiello e incluso dieron detalles sobre la peculiar organización obrera que encontraron en la Sociedad Hullera Española. Todo este material está dirigido sobre todo a las cuestiones técnicas, pero ahora nos va a servir para conocer algo sobre una de las categorías de trabajadoras que enumeramos más arriba: las pizarreras. 
La escritora Aitana Castaño y el dibujante Alfonso Zapico rinden homenaje a todas esas mujeres a las que nadie tenía en cuenta, «ni en el trabajo ni en la vida». - E. C. Saber más... El Correo.

Como ustedes seguramente conocerán, antes de llegar al mercado la hulla necesita un tratamiento para descartar los trozos más gruesos, lavar el menudo y depurar el polvo que en aquel final del siglo XIX ya se transformaba en aglomerados o cok metalúrgico. El carbón de nuestras minas, conocido según se extrae como todouno, pasaba a los lavaderos dotados con la mejor tecnología de la época para seguir un minucioso proceso que acababa dejando hasta un 50 o 60 de menudo, apto ya para colocar en el mercado según los diversos calibres que demandaba cada cliente. Los lavaderos de todas las empresas tenían características comunes, pero diferían notablemente en los medios mecánicos que empleaban en sus operaciones, aunque siempre llegaba un momento en que era necesario realizar a mano algunas labores, y ahí estaban nuestras pizarreras. Podemos tomar como ejemplo cualquiera, pero vamos a ver a grandes rasgos lo que pasaba en el de Sovilla, de la Sociedad Hullera Española, muy cerca del punto en el que confluyen los ríos Aller y Lena y situado ventajosamente cerca de la estación de Ujo.
Carboneras en el lavadero de «La Encarná». Año 1948-50. (Foto Nº 7048 - Cedida por la Asociación Cultural "Amigos del Valle de La Hueria". La Hueria, San Martín del Rey Aurelio). Ver enlace... Memoria Digital de Asturias.
El carbón era sometido ya a un calibrado preliminar a bocamina en tres grandes cribas rectangulares con un fondo de planchas de acero con perforaciones. Allí ya se empleaba mano de obra recogiendo los mayores trozos, mientras que lo que se colaba por los agujeros caía sobre unas vagonetas que lo conducían al taller. Una vez en su destino, el contenido se vertía en una tolva inferior a la vía pero más alta que el lavadero y pasaba por otras tres cribas de sacudimiento también con agujeros, pero que iban en disminución: 100 mm el superior, 45 el intermedio y 15 mm el último. Este conjunto de cribas superpuestas se conocía como cribo n.º 1 y alcanzaba una producción de 1000 a 1500 toneladas diarias. Del cribo salían cuatro categorías de carbón, pero las pizarreras trabajaban en la de mayor tamaño. 
Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
Esta quedaba sobre la plancha superior y ascendía por un plano movible formado de placas de acero articuladas, protegidas por dos pequeños rebordes laterales, que se conocían como transporte, y en realidad no era más que una mesa de escogido rectangular y continua, sin fin, movida por una polea. Las mujeres se situaban a ambos costados verificando el escogido, separando la pizarra y dejando que la hulla siguiese su camino. Su número variaba según la producción, pero en el caso del lavadero de Sovilla estaba entre las ocho y la docena, y las “afortunadas” que conseguían este empleo desarrollaban jornadas de doce horas de trabajo, aunque si ustedes suponen que su salario iba en relación con este tiempo, se equivocan, ya que solo se llevaban 1,25 pesetas, casi un tercio del jornal medio de 3,25 pesetas que los varones cobraban en la empresa. Y esta era la norma en los otros lavaderos. 
Trabajadores/as de los lavaderos de Fábrica de Mieres. Mieres, Asturias. Año 1925. Por: Álbum Fotográfico de Mieres (1864-1939). Archivo Histórico Minero
En el transporte de Turón junto a las mujeres también trabajaban niños, pero aquí, en vez de quitar la pizarra, que al ir en menor proporción debería ser el objeto del escogido, la labor era aún más dura porque lo que se sacaba era la hulla. El lavadero de Turón era de tipo belga, montando por la casa Evence Copée y para su marcha normal solo hacían falta catorce hombres: seis en el basculador, dos maquinistas, dos fogoneros, tres lavadores y un vigilante; mientras que en el transbordador de cribado había diez mujeres y cuatro niños. Después, la carga en vagones la hacían siete operarios y otros cuatro se dedicaban a la limpieza de los depósitos de lodo. Aquí, los jornales devengados por los peones variaban entre las 2,25 y las 2,75 pesetas; los maquinistas cobraban 3,50; los fogoneros y los lavadores 2,75, y las mujeres y los niños recibían todavía menos que en las minas de Aller: de 1,15 a 1,20 pesetas. En otros lavaderos no consta el empleo de mujeres y sí de niños ocupando su lugar. Así, al revisar la plantilla del de Baltasara encontramos dos lavadores, dos basculadores, un maquinista, un fogonero y nueve pinches, de los que uno era engrasador, otro se encargaba de pintar, barrer, limpiar los árboles y servicios parecidos, el tercero sacaba los vacíos y los otros seis eran los cribadores.
Trabajadores/as de los lavaderos de Minas del Peñón. Valle L’Agüeria San Xuan de Mieres, Asturias. Año 1917. Archivo Histórico Minero
Y la cosa apenas cambiaba en la cuenca del Nalón. En “La Justa”, frente a la estación de Peña Rubia, del ferrocarril que unía a Ciaño con la estación de Soto de Rey para enlazar con la línea nacional, la Unión Hullera y Metalúrgica de Asturias tenía empleadas en su moderno taller de lavado a tres o cuatro mujeres por cada criba, trabajando codo con codo con los niños, encargadas de separar las pizarras, que allí se denominaban costeros, por un jornal medio de 1 a 1,5 pesetas. Sin embargo, en el taller de María Luisa tampoco encontramos mujeres. El ingeniero Ramón de Urrutia, director local de aquella mina había montado un sistema que no las precisaba, dejando así la plantilla del lavadero: un maquinista y lavador cobraba de 4,50 a 5 pesetas; un fogonero de 3 a 3,50; dos ayudantes, de 4 a 4,50, tres basculadores, de 5,25 a 6; dos espaladores, de 3 a 4 y un solo muchacho de 1 a 1,25. Después, como saben, la historia hizo un bucle. Los sindicatos pelearon primero para sacar a las mujeres de las minas, y a finales del siglo XX por lo contrario, para que volviesen a compartir tajo con los hombres, pero esta vez en igualdad de condiciones. No hace mucho se ha publicado el libro “Carboneras”, con texto de Aitana Castaño y e ilustraciones de nuestro dibujante Alfonso Zapico. Si quieren profundizar en este asunto, deben leerlo.
 Portada del libro “Carboneras”, De Aitana Castaño y dibujos de Alfonso Zapico. (…). «Carboneras son un homenaje en realidad a todas las mujeres de las cuencas. Están vinculadas a la mina desde un punto de vista profesional pero también representan a nuestras abuelas, a nuestras madres, a las novias, amantes, hermanas y tías, que vivieron aquí”. (…). Saber más... eldiario.es.
FUENTE: ERNESTO BURGOS-HISTORIADOR. Publicado por La Nueva España el 03·08·2021. Ver enlace.
________________________________________________________________________
AUTORES.

Ernesto Burgos Fernández (historiador). Nació en Mieres (Asturias) el 7 de julio de 1957. Historiador, columnista y biógrafo, éstas son algunas de las facetas de un Ernesto Burgos que rescata con talento personajes y anécdotas de nuestra historia. Un notorio investigador y gran divulgador. Licenciado en Geografía e Historia por la Universidad de Oviedo (1979). Diploma de Estudios Avanzados en Arqueología Histórica («La romanización en las cuencas mineras del sur de Asturias» 2006). Profesor de Educación Secundaria, ha trabajado en los institutos «Juan de Herrera» (Valladolid), «Sánchez Lastra» (Mieres), «Camino de La Miranda» (Palencia), «Valle de Aller» (Moreda) y desde 2006 en el IES «Mata Jove» de Gijón. En el año 2016 el reconocido historiador mierense fue distinguido con el reconocido galardón anual de “Mierense del año”. Secretario General de Izquierda Republicana en Asturias (1992-2002); miembro fundador del Partido por la III República (P3R) y actualmente vicepresidente del Ateneo Republicano de Asturias. Coautor de los libros de texto «Entre amigos» (Conocimiento del Medio) para Asturias y Cantabria (2002); coordinador de la revista de Ciencias Sociales «Cuadernos de Mieres» (2001-2002); experto en la cultura y la historia de las cuencas mineras asturianas. Ha impartido varios cursos sobre el patrimonio arqueológico de Aller, Lena y Mieres y defendido ponencias sobre su temática en jornadas y congresos. Desde los años 70 escribe desinteresadamente artículos para numerosas publicaciones, álbumes y periódicos locales (Esquisa, Mieres 30 días, La Voz de Ujo, Camín de Mieres, Mieres, El Carbón, Por tierras del Caudal, Aula de Paz…). Ha sido pregonero en las fiestas de Santa Bárbara (2002); La Teyerona (2006); San Xuan de Mieres (2007) y Santa Cruz (2011). Histórico militante republicano. Secretario General de Izquierda Republicana en Asturias (1992-2002); miembro fundador del Partido por la III República (P3R) y actualmente vicepresidente del Ateneo Republicano de Asturias. Biógrafo de los revolucionarios mierenses Manuel Grossi Mier («Cartas de Grossi». 2009) y Jesús Ibáñez («Y el verbo se hizo furia». Semana Negra 2010), también ha prologado a varios autores asturianos. Colaborador del diario asturiano La Nueva España, donde ha firmado las series: «El patrimonio de Las Cuencas» (1998-2000); «100 años de historias y andanzas» (2000-2002) y «Los personajes de nuestra historia» (2003-2004). Desde febrero de 2005 mantiene ininterrumpidamente la página semanal «Historias heterodoxas». FUENTE:

Alfonso Zapico (Blimea, Asturias, 1981). Historietista e ilustrador freelance. Profesional gráfico desde el año 2006. Trabaja en proyectos educativos del Principado de Asturias (Aula Didáctica de los Oficios) e impartido talleres de ilustración en centros educativos de Asturias y Poitou-Charente (Francia).  Realiza ilustraciones, diseños y campañas para diversas agencias de publicidad, editoriales e instituciones. Es ilustrador de prensa en diarios regionales asturianos (La Nueva España, Cuenca del Nalón, Les Noticies…).  Se estrena en 2006 con un álbum de corte histórico para el mercado franco-belga, La guerra del profesor Bertenev (Dolmen, 2009). Su primer trabajo publicado directamente en España es Café Budapest (Astiberri, 2008), donde se mete de lleno en una ficción determinada por los orígenes del todavía no resuelto conflicto palestino-israelí. Acto seguido apuesta por recrear en cómic la vida de James Joyce, Dublinés (Astiberri, 2011), que gana el Premio Nacional del Cómic 2012 y a raíz del cual surge el cuaderno de viaje La ruta Joyce (Astiberri, 2011).  Vive en la localidad francesa de Angouléme, donde, tras realizar El otro mar (Astiberri, 2013) a caballo de su Asturias natal, a la que vuelve con regularidad, se encuentra preparando su nueva y ambiciosa obra, “La balada del norte”, que constará finalmente de cuatro tomos.  Esta magnífica obra es un auténtico tesoro de la novela gráfica española y refleja la negrura de los valles mineros de Asturias de los que surgen personajes luminosos, y bajo el ruido atronador de las minas de carbón se escucha el susurro de una canción antigua. Los viejos y nuevos tiempos chocan brutalmente poniendo a prueba al protagonista, pronto a la Humanidad entera. Éste es el sonido de "La balada del norte". En un paréntesis, entre el segundo y tercer volumen de La balada del norte, Zapico completó Los puentes de Moscú (Astiberri, 2018), para mostrar de nuevo su faceta como reportero gráfico al poner el micro al diálogo entre el político Eduardo Madina y el músico Fermín Muguruza. Sus libros han sido traducidos al inglés, francés, alemán o polaco. (…). Foto Wikipedia - Twitter

EL BLOG DE ACEBEDO. (ANTOLOGÍA DE LA HISTORIA). La Historia es una disciplina académica que aspira a comprender el pasado y la forma en que se ha configurado el presente. Es necesaria para entender, para cambiar y para saber cómo ha llegado a existir la sociedad en la que vivimos.

“El único deber que tenemos con la historia es reescribirla”. (Oscar Wilde)

El Blog de Acebedo se adentra en la historia de nuestra tierra, TODO SOBRE ASTURIAS, MIERES Y CONCEJO. navegar en este blog, es conocernos mejor a nosotros mismos y nuestra dilatada historia. Como decía el poeta mierense Teodoro Cuesta García-Ruiz (09/11/1829 – 01/02/1895), “soy d´esa villa y á honra tengo haber nacío n’ella”. FUENTE. El Blog de Acebedo.

_________________________________________________________________________________
_________________________________________________________________________________

NOTA: Los nombres de los autores aparecen en el pie de cada imagen o al final de cada artículo, si no es así, se debe a que es un dato que se desconoce, así que, si algún autor la ve en este blog, le rogamos que se ponga en contacto con El Blog de Acebedo para hacerlo figurar o para borrarla si es su deseo, porque es justo reconocer a los autores

Si te ha interesado esta entrada y quieres preguntar, comentar o aportar algo al respecto, puedes dejar un comentario o escribir a mi dirección de correo del blog con la seguridad de ser prontamente atendido.

¡¡¡Difunde El blog de Acebedo entre tus amistades!!!

Sígueme en:

© - Facebook - Roberto Cortina

© - Twitter - El blog de Acebedo

© - El Blog de Acebedo

© - Instagram - acebedo.mieres

 

Esta página se editó por última vez el 04 de junio de 2023 a las 09:16 horas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario