10 de junio de 2015

Oscar de Olavarría / Gijón (Asturias), creció potente y rotundo (y III)

La casa de don Óscar de Olavarría

La casa de don Óscar de Olavarría. La Nueva españa
El maestro de obras Juan Bolado diseñó la mansión del naviero local a imagen de las existentes en los grandes puertos europeos

La casa de don Óscar de Olavarría. La Nueva españa
La Nueva España.
Al contrario de lo que hizo D. Melitón González, que esperó en su casa de «Las Figares» el que se construyera un dique en el Humedal para atender de «visu» sus negocios navieros, D. Óscar de Olavarría, que en su tiempo llegó a ser el gran naviero local, en cuanto tuvo ocasión trasladó su casa habitación de la calle Corrida a la dársena recién ampliada con el paredón de Liquerique.Fue en 1873 cuando el naviero inició las obras de su nueva casa en la calle de S. Juan Bautista, que se señaló con el n.º 11. En ella, además de domicilio, estableció su escritorio, e inició la honrosa función de cónsul de Rusia. Se cuenta la anécdota de que desde este nombramiento, durante los inviernos usaba grueso gabán con cuello y solapas de auténtica piel de zorro de las estepas.
La casa de don Óscar de Olavarría. La Nueva españa
En 1862, año en que D. Óscar llega a Gijón, todavía la dársena local no era más que «una ratonera», al decir de uno de los capitanes de las líneas sevillanas que frecuentaban nuestro puerto, porque aquellos vapores andaluces, con una cabida máxima de apenas 500 toneladas, se veían obligados a fondear en la concha exterior, entre Santa Catalina y Torres, cosa que después de la terminación del «paredón» concedido por Isabel II, solo harían los grandes vapores y los primeros transatlánticos. En 1868, año de la Gloriosa Revolución, que se implantó con rugidos de cañón y al grito de «¡Fuera los Borbones!», figuró D. Óscar en el padrón de los revolucionarios «setembrinos», o sea, en lista de los «Voluntarios de la Libertad», que mandó levantar la Junta Revolucionaria. En 1870, en estado civil de soltero, capitán de floreciente flota y contando ya como socios con los principales nombres de Asturias, entre los que se encontraba el del muy ilustre de D. José Caveda y Nava, tiene su primer hijo con D.ª Carlota González Solares, Emilio, que a los 31 años, poco después de regresar de Filipinas, donde contrajo matrimonio con una joven toledana, Elvira García del Rey Carnerero, fue elegido por los empresarios gijoneses su capitán para dirigirlos en la pugna que casi durante tres meses sostuvieron empresarios y clase trabajadora a propósito de la huelga que desencadenó la Sociedad La Cantábrica, propia de los obreros del puerto; pugna que después se extendió al resto de la industria y la construcción, y que terminó con la completa derrota de los «incautos» obreros: los promotores se vieron obligados a emigrar de Gijón, y los huelguistas de a pie a pedir el reingreso en sus industrias, sin conseguir ni el pretendido aumento de dos reales de salario, ni la jornada de las ocho horas, sino que con los salarios viejos, se vieron obligados a trabajar, cuando menos, diez, cuando no doce horas diarias. 
La casa de don Óscar de Olavarría. La Nueva españa
Emilio murió en marzo de 1902, apenas dos meses después de su padre, que ocurrió el 26 de enero anterior, a consecuencia de una nefritis que, al parecer, contrajo en las Filipinas, siendo concejal de Gijón. No dejó descendencia. En 1878, el rey designó a D. Óscar, alcalde de la villa, después de la excelente gestión que el opulento naviero había realizado, como alcalde accidental -a pesar de su declarado «republicanismo activo»-, durante la visita que el monarca y su hermana Isabel efectuaron a la villa el mes de agosto anterior. Como prueba de la firmeza de su credo y de sus buenas maneras, cuando fue distinguido por el monarca con la distinción máxima de la Orden de la Reina Católica, no la rechazó: se limitó a no pagar después los correspondientes derechos... Fue D. Óscar, además de soltero, republicano y librepensador, y nunca faltaron sus excelentes puros en las celebraciones republicanas, primero habanos, después de la «Flor de la Isabela», de la Cía. de Tabacos de Filipinas, de la que era agente en Gijón como encargado de los tráficos del santanderino D. Antonio López. Fue prototipo del gijonés dialogante, tanto con sus dependientes como sus vecinos, cuando Alcalde; éstos encontraron en su autoridad, eficacia en la gestión, comprensión en los problemas, y apoyo decidido a sus intereses, hasta el punto que por una pugna que desde la Alcaldía mantuvo con el gobierno de S.M. por cuestión de la contribución de la sal, que entendía perjudicial para la villa, no dudó en presentar su renuncia al Ministerio en cuya decisión adoptada oficialmente el 31 de diciembre de 1878 le siguió la Corporación.

Gijón. Casa Consistorial. Inaugurándose las obras en 1862, terminado en 1865 y su arquitectura pertenece al orden compuesto. fue su arquitecto D. Andrés Coello, tubo de costo de 130.000 pesetas y ocupa un área de 540 metros cuadrados. Los planos fueron aumentados por los arquitectos D. Luis Céspedes y D. Lucas M.ª Palacios.  Biblioteca virtual. Asturias.

Frecuente su dicho, en la confitería de Fernando Muñiz, vecina al Consistorio, «ésta no es mi casa, ni la de los concejales que conmigo gobiernan, sino la casa del pueblo que con su voto ha confiado sus intereses a nuestra rectitud y laboriosidad». Participó muy activamente en el mismo 1878, en la fundación de «El Comercio», periódico de intereses generales pero de clara tendencia republicano-liberal, de la mano de sus socios D. Anselmo Cifuentes y D. Florencio Valdés y otros conspicuos gijoneses. En 1880, cumplidos los cuarenta años, nace su segunda hija, Juana fruto de su nunca interrumpida relación con D.ª Carlota González, a la que dejó heredera de su fabuloso seguro de vida, de nada menos que 250.000 pesetas. Fue muy breve la vida de esta hija, pues a los 24 años (1904) moría en Bilbao, dejando viudo a su esposo Gonzalo del Río Larrauri con un hijo, Óscar del Río Olavarría, de apenas un año. En 1883, cuando ninguna desgracia amenazaba su despejado horizonte, comienza D. Óscar las obras de su nueva mansión, que tendría fachada principal a Abtao (muelle) y la posterior a San Juan Bautista (hoy Óscar de Olavarría); casa que reformará y ampliará entre 1883 y 1886, bajo planos del maestro de obras D. Juan Bolado, hasta convertirla en su gran mansión, que recuerda (en pequeño) las grandes casas navieras existentes en los principales puertos europeos, que acogían en un solo edificio dando cara al mar, domicilio, escritorio en la entreplanta y en los bajos, almacenes. 
Gijón. Torre de Jove y Capilla de San Lorenzo. Data del siglo XVII, así como la capilla contigua y pertenece a la familia de José Hevia. Biblioteca virtual. Asturias.

Hoy sigue en pie la casa y siguen a la vista algunos de sus miradores y la rejería, trabajados en la fundación de Kessler, Laviada y Compañía. Pena que el público no tenga acceso al espacio interior del portal de la vieja mansión, pues sin duda es el más singular espacio de los de su especie de todo Gijón. En sus mejores momentos la morada de D. Óscar acogió hasta doce personas contando al propio naviero, su hermana Justina, sus hijos: Emilio con su esposa, y Juana; la institutriz parisina de ésta, Nela Salachouse, que además de cumplir sus funciones con la joven, ayudó a D.ª Fátima, hermana de D. Óscar, en la selección de bastones y sombrillas, que esta señora se hacía traer de París para surtir su comercio de «bastonería», que era frecuentado por las «elegantes» de la villa. D.ª Fátima casó con otro vasco, D. Eusebio Zubizarreta y fueron padres de un «mozarrón», que les salió algo alocado y muy carlista, en cuya rama fue diputado, llegando a secretario particular Carlos VII; después de muerto D. Óscar, el pretendiente le hizo conde. En octubre de 1901, cuando el naviero ya estaba en el declive de su vida, el mozarrón protagonizó en el atrio de S. Pedro, cuando las famosas procesiones del «Jubileo», un violento incidente, revólver en mano, que causó en todo Gijón gran escándalo, y especial dolor a su tío. También tenían habitación propia en la casa el camarero de D. Óscar, la cocinera Antonia Soto, famosa por la categoría de sus banquetes, el fiel portero Juan Álvarez, y dos sirvientas. No fueron éstos de que venimos hablando los primeros «olavarrías» llegados a Gijón, sino que los primeros en hacerlo fueron D. José Ramón, padre de D. Óscar, y su hermano, el solterón D. Pedro Santiago de Olavarría Santa Cruz y Liquerica o Lequerica, que llegaron sobre 1856-57, llamados por D. Pedro Duro para que colaboraran en la instalación de su gran factoría de Langreo. Éstos reposan en un nicho del cementerio de Ceares desde 1886; y a sus restos se unieron, en 1926, los de D.ª Carlota González Solares.

Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.

FUENTE: FRANCISCO PRENDES QUIRÓS. Publicado por la Nueva España el 26-08-2013. Ver enlace. 
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AUTORES.

Francisco Prendes Quirós (1939-2019), abogado, político, e intelectual. Fue consejero de Presidencia en la preautonomía de Rafael Fernández y formó parte del Consejo Regional que, encabezado por Rafael Fernández, se encargó de negociar el Estatuto de Autonomía del Principado. Se afilió al Partido Socialista Popular (PSP) en el que militaban Pedro de Silva y Fernando Morán y que presidía a nivel nacional Enrique Tierno Galván, a quien tenía como modelo político y cuyo retrato mantuvo siempre en su despacho de la calle Instituto. Se presentó como cabeza de lista de este partido a las elecciones de 1977 y permaneció como su presidente en Asturias hasta su absorción por el PSOE. (...). El Ayuntamiento de Gijón le concedió el título de Hijo Predilecto de la Villa de Gijón a título póstumo. (...). Fuente: El comercio.

EL BLOG DE ACEBEDO. (ANTOLOGÍA DE LA HISTORIA). La Historia es una disciplina académica que aspira a comprender el pasado y la forma en que se ha configurado el presente. Es necesaria para entender, para cambiar y para saber cómo ha llegado a existir la sociedad en la que vivimos.

“El único deber que tenemos con la historia es reescribirla”. (Oscar Wilde)

El Blog de Acebedo se adentra en la historia de nuestra tierra, TODO SOBRE ASTURIAS, MIERES Y CONCEJO. navegar en este blog, es conocernos mejor a nosotros mismos y nuestra dilatada historia. Como decía el poeta mierense Teodoro Cuesta García-Ruiz (09/11/1829 – 01/02/1895), “soy d´esa villa y á honra tengo haber nacío n’ella”. FUENTE. El Blog de Acebedo.

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NOTA: Los nombres de los autores aparecen en el pie de cada imagen o al final de cada artículo, si no es así, se debe a que es un dato que se desconoce, así que, si algún autor la ve en este blog, le rogamos que se ponga en contacto con El Blog de Acebedo para hacerlo figurar o para borrarla si es su deseo, porque es justo reconocer a los autores.

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9 de junio de 2015

Melitón González García / Gijón (Asturias), creció potente y rotundo (II)

El hombre que decía «la mar no guarda fiestas»
Proyecto del Puerto de Refugio y Comercial de Gijón. Biblioteca virtual. Asturias.
Melitón González García, empresario y naviero, participó activamente en el desarrollo económico del Gijón de mediados del XIX 
Aunque hoy sea prácticamente desconocida, la firma naviera de Melitón González García, «Melitón González y Cª», fue muy importante y contó con capitales procedentes de «las américas» La Nueva España.

La Nueva España
El Gijón expansivo de mediados del siglo XIX creció sobre tres pilares: la industria, el comercio y la navegación. Y esos pilares fueron arrastrados y colocados en posición de despegue por la fuerza del Ferrocarril de Langreo, inaugurado en 1852. Dentro del ramo de la navegación brillaron con luz propia, entre otras, las casas de Melitón González primero, y la de Oscar de Olavarría, después; dentro de la industria local, por sobre todas, la casa de Anselmo Cifuentes, presente en todos los frentes, y la de Domínguez Gil, algo en la industria y mucho en la innovación mantequera; en el comercio, destacaron las de los mil Alvargonzález, que en esta villa han sido, y destacó la de Eduardo Martínez Marino y López, cuñado liberal del Olavarría republicano. 

8 de junio de 2015

Gijón (Asturias), creció potente y rotundo (I)

Tiempo de vapores

Gijón. Ante -Puerto. Muelle de Liquérica. Se construyó desde el año 1859 a 1864 y lleva el nombre del capataz que dirigió las obras. Biblioteca virtual. Asturias.

El fallido proyecto de fusión de las históricas compañías navieras de Melitón González y Óscar Olavarría 

Vapores de Melitón González y compañía. “Barambio”. Archivo del Blog.

La Nueva España.
Mientras Gijón creció potente y rotundo; mientras que los grandes establecimientos industriales, de Gijón y La Felguera, importaron maquinarias y exportaron productos fabricados en sus talleres, y enviaron a puertos de toda España los carbones de sus minas; mientras que los comercios de todo género se abrían los domingos para no cerrarse en toda la semana; mientras los grandes almacenes de los«Agustinos» o de los Velasco, tragaban en sus bodegas de Abtao o de la calle Padilla, las bodegas enteras de los vapores que hacían «cola» para atracar en nuestro puerto, las grandes compañías navieras, sociedades en comandita, de Melitón González y Óscar de Olavarría, ganaron dinerales a espuertas.

7 de junio de 2015

El ferrocarril minero del Peñón, Vegadotos y el Casar (Mieres)

El tren del Peñón

Fuentes: Fernando Fernández Menéndez /Javier Fernández López (Revista de historia ferroviaria)

Los vestigios de un viejo ferrocarril minero. El llamado tren del Peñón, en el concejo de Mieres, era uno de estos ferrocarriles y a pesar de su temprano cierre, por sus peculiares características resulta uno uno de los más evocados a la par de menos conocidos en esta zona minera. Artículo documentado con un buen número de fotografías extraídas con su texto, de: "Revista de Historia Ferroviaria"

D. José Sela y Sela (1881-1963), abogado, empresario y Alcalde de Mieres entre los años 1923 y 1930 (considerado uno de los mejores alcaldes de Mieres), participó, como dueño, arrendatario o accionista en multitud de negocios mineros, metalúrgicos o de banca, tanto regionales como nacionales, entre ellos las minas del Peñón. Se convirtió en yerno de Inocencio Fernández Martínez al contraer matrimonio con Amparo Figaredo Herrero, hija de aquél. Falleció en Madrid en 1963. Fuentes: Fernando Fernández Menéndez /Javier Fernández López. Foto Archivo.

La Nueva España
El Tren del Peñón, en el concejo de Mieres, realizaba un recorrido que podía dividirse en tres partes. Una primera desde las minas del Casar hasta la plazuela de Cuevas sobre el reguero del Cadabal, otra que continuaba desde este punto por la ladera izquierda del valle de San Juan hasta llegar a las proximidades de Mieres y una tercera que discurría como tranvía hasta la estación del Ferrocarril del Noroeste (línea de vía ancha de Pola de Lena a Gijón). Transportó el carbón de las minas del valle de San Juan, ubicadas en el Peñón, Vegadotos y el Casar, explotadas por las diversas empresas que se fueron sucediendo en su propiedad: J.Bertrand y Compañía, Manuel Fernández y Compañía, Minas del Peñón, Sociedad Minera del Caudal y del Aller y Minas Tres Amigos. La empresa J.Bertrand y Compañía que explotaba las minas del valle del Cadaval transportaba los carbones en carros hasta Mieres y para facilitar este transporte inició los trámites para la construcción de un ferrocarril.