14 de abril de 2015

Las instalaciones del deporte de la "escopeta" en Mieres

La insólita historia del campo de tiro José del Valle
Entrada a las intalaciones del Campo Municipal de Tiro. «José del Valle». Facebook Club De Tiro Mieres.
Las instalaciones han pasado por gestión privada y pública hasta encontrar la estabilidad que permite su supervivencia
Las instalaciones del Mieres Club de Tiro. La Nueva España.

La Nueva España.
Aunque el ambiente mierense sigue su curso a bajo cero en la actividad colectiva y cooperativista, tiene algunos ejemplos que, por su singularidad, resultan insólitos. Decir hoy que Mieres cuenta con una de las tres canchas de tiro al plato que hay en Asturias en pleno funcionamiento, casi resulta incongruente, aunque, como es lógico, responde a la realidad. Y para que se haya dado esta circunstancia y sobre todo esa actividad permanente fueron necesarios tres pilares, en el tiempo y en la forma, como son la puesta en funcionamiento a través de la iniciativa particular, seguido de la adquisición por parte del Ayuntamiento y la cesión al Mieres Club de Tiro, sociedad que tampoco ha tenido una gran difusión, y, finalmente, el uso contratado que viene haciendo de las instalaciones la sección de tiro al plato del Grupo Empresa de Hunosa. Son tres claves que unidas en el transcurso de la historia han hecho posible esta especie de "milagro" dentro del contexto de apatía que viene inmovilizando el afán ciudadano de esta santa casa.

12 de abril de 2015

El republicano Lavianes José Concheso de Coya

El testamento de José Concheso
José Concheso de Coya, nació en 1869, en Pando, parroquia de Llorío (Laviana - Asturias). Emigró a América, de dónde regresó con algún capital y cierta cultura. A su regreso se estableció como hostelero, fijando su negocio finalmente en el año 1906, en la calle que luego llevaría su nombre en Laviana. Se casó con Inocencia Arrieta y nunca tuvieron hijos. Murió el 30 de octubre de 1911.  Fuente: Francisco Trinidad. (...). Saber más... el poder de la palabra.
El lavianés, ahora poco recordado, fue un personaje muy conocido y el primer vecino del concejo enterrado sin ceremonia religiosa por voluntad propia
Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
La Nueva España
La otra tarde estuve tomando unos cafés con Francisco Trinidad. Hablamos de los divino y de lo humano -seguramente más de lo primero que de lo segundo- y desde la mística de Santa Teresa, pasando por la historia de la mina San Vicente y el pragmatismo de Belarmino Tomás, llegamos a la bondad de José Concheso. Yo nunca había oído hablar de este hombre pero Paco me ilustró sobre quien fue uno de los más personajes más interesantes de la historia de Laviana, reconocido por sus vecinos en otra época y ahora ya olvidado. Hubo un tiempo en el que su retrato se conservaba en la Casa del Pueblo con una inscripción en la que se podía leer que había sido el primer lavianés enterrado sin ceremonia religiosa por voluntad propia, e incluso antes de la Guerra Civil la calle principal de esta villa llevaba su nombre. Afortunadamente Francisco Trinidad no pudo sustraerse al interés de esta biografía y en el primer boletín de la Fundación Emilio Barbón publicó un magnífico artículo "Acerca de don José Concheso de Coya", del que con su permiso voy a extraer hoy algunas informaciones, porque soy de los que defienden que existen dos muertes, la física y la del olvido, y es nuestro deber conservar el recuerdo de aquellas personas que merecen seguir en la memoria de los pueblos.

11 de abril de 2015

María Teresa Junquera Ibrán (La Rebollada - Mieres, 1890 - Valdemoro - Madrid 1981)

María Teresa Junquera: nuestra Natacha
Retrato de D. Jerónimo Ibrán y Mulá, (padre de María Teresa Junquera Ibrán) 29 de noviembre de 1842, Mataró (Barcelona)- 1910, Oviedo. Obra de J. M.ª. Fernández Peláez. Casa Consistorial - Ayuntamiento de Mieres.

La vida de la nieta del mierense Jerónimo Ibrán pudo ser la inspiración para el personaje principal de una de las obras más conocidas del dramaturgo Alejandro Casona
 
Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
Jerónimo Ibrán fue uno de nuestros grandes hombres. Aunque había nacido en Mataró lo consideramos mierense de adopción. Numa Guilhou lo vio claro cuando le confió la dirección técnica y administrativa de su fábrica, que su hijo era incapaz de asumir, y gracias a su trabajo y a su ingenio el negocio no solo superó sus dificultades, sino que se convirtió en un ejemplo de lo ahora se llama I+D, abordando las construcciones metálicas con aplicación a puentes y vigas armadas con la tecnología más moderna de su época. Fue también un eficaz director de la Escuela de Capataces de Minas y de los Ferrocarriles Económicos de Asturias y consejero de las empresas más importantes de Asturias. Todo esto es sabido y ha recibido el homenaje de este pueblo en varias ocasiones. Menos conocida es su vida personal, por eso he seguido el consejo de Rolando Díez para que profundizase un poco en la figura de una de sus nietas y me he encontrado con una sorpresa: María Teresa Junquera Ibrán, de la que yo nunca había oído hablar y en la que he encontrado una biografía digna de reseñar. La traigo hoy a esta página.

9 de abril de 2015

El Club La Cucaracha de Mieres del Camino

Los cincuenta años de un acto de rebeldía juvenil
Logo (escudo), del "Club La Cucaracha 1964-1971". Ver video en YouTube.

El Club La Cucaracha celebró el medio siglo de su fundación  De nuevo la vieja Casa Rectoral de San Juan de Mieres, esquina a las calles Jerónimo Ibrán y Carreño Miranda, volvió a ser protagonista en diciembre del 2014 de un destacado hecho singular a todas luces
Víctor Manuel y Baldomero Pérez. (…). Bajo el paraguas de la iglesia y más concretamente del párroco Nicanor López y de su coadjutor, Baldomero Pérez, nació en los sótanos de la casa rectoral de Mieres, "La Cucaracha", un club juvenil cuyos miembros, 50 años después, quisieron recordar. (…). La Nueva España. 

La Nueva España
En su fachada figura una simple placa con esta inscripción: "Club La Cucaracha 1964-1971". El acto de su descubrimiento resultó también sencillo pero con una fuerte carga de emoción. Allí estaba una más que fuerte representación de aquellos ¡jovencitos!, entre los quince y los dieciocho años, hoy hombres maduros, hechos y derechos, que por aquellos andares de principios de la década de los sesenta, se convirtieron en artífices de un espontáneo acto de rebeldía sana y pacífica, para dirigir libremente su forma de vida en el campo de la diversión, la práctica de deportes y visión propia de aprovechamiento del tiempo libre. Había nacido el Club de La Cucaracha. Pero, como en cualquier cuestión vital, existían unos motivos y fueron necesarios unos mimbres para alcanzar el objetivo.