La sangre del Dos de Mayo
Antes de seguir, les voy a recordar en unas
líneas como se produjeron los hechos aquel día en que el pueblo
madrileño se alzó contra uno de los ejércitos más poderosos que jamás
han existido; luego conoceremos el papel que jugaron allí algunos de
nuestros paisanos de la Montaña Central de Asturias. A ello. La
gestación de una guerra siempre es compleja, pero los inicios de esta
que marcó a varias generaciones hay que buscarla en la inteligencia de
Napoleón, quien supo aprovechar la enemistad entre el Príncipe de
Asturias, el futuro Fernando VII, y Godoy, el valido de su padre Carlos
IV. El emperador firmó un convenio secreto con éstos últimos por el cual
se autorizaba a sus tropas a cruzar la Península para conquistar
Portugal y hacer de él tres partes: el norte para el rey español; el
llamado reino de los Algarbes para Godoy y el resto para los reyes de
Etruria, que acababa de ser ocupado por el Emperador francés.