Taller del
astillero Riera y Menéndez. A la izquierda, con traje y sombrero, Estanislao
Menéndez, detrás, con gorra y barba, Luis Riera. Facebook: Hernán Piniella Iglesias. |
Espectadores en una corrida en la plaza de toros de El Bibio. La Nueva España. |
La Nueva España.
La primera década del siglo XX iba a finalizar -tras la hambruna que llevó a que la población saliese a la calle en busca de alimentos de subsistencia- con el logro de la jornada laboral de ocho horas que no fue respetada por muchos empresarios; el Alcalde se vio obligado a dimitir tras una moción de censura por haber presidido una corrida de toros en El Bibio; el fotógrafo Laureano Vinck rodó la primera película con argumento en Gijón, cuyo título era "Por robar fruta" -muy testimonial en aquella época de tantas carencias-; Emilio Robles, "Pachín de Melás", triunfaba con su espectáculo de entremeses escritos por él "La herencia de Pepín" y "Los rapazos cantariegos o ca'dun con lo suyo", y las mangas cortas se adueñaban de la moda en los vestidos femeninos después de la abolición de las mangas largas.
La primera década del siglo XX iba a finalizar -tras la hambruna que llevó a que la población saliese a la calle en busca de alimentos de subsistencia- con el logro de la jornada laboral de ocho horas que no fue respetada por muchos empresarios; el Alcalde se vio obligado a dimitir tras una moción de censura por haber presidido una corrida de toros en El Bibio; el fotógrafo Laureano Vinck rodó la primera película con argumento en Gijón, cuyo título era "Por robar fruta" -muy testimonial en aquella época de tantas carencias-; Emilio Robles, "Pachín de Melás", triunfaba con su espectáculo de entremeses escritos por él "La herencia de Pepín" y "Los rapazos cantariegos o ca'dun con lo suyo", y las mangas cortas se adueñaban de la moda en los vestidos femeninos después de la abolición de las mangas largas.