5 de enero de 2013

El Poeta Gijones, "Alfonso Camín"

El regreso de Alfonso Camín.

 
El poeta gijonés tenía 77 años cuando retornó a España, donde sufrió apuros económicos y persecución policial, aunque recibió numerosos homenajes antes de su muerte. (artículo publicado por Ernesto Burgos en La Nueva España el  Miércoles 02 de enero de 2013).
Albino Suárez nunca olvidará la madrugada del 25 de septiembre de 1967, cuando pudo hacer realidad una escena con la que había distraído muchas veces su imaginación para evadirse del duro trabajo minero. Albino era entonces un aprendiz de poeta con ganas de acercarse a quienes pudiesen ayudarle a andar el camino de las letras. En poco tiempo se había encontrado con las dos caras de aquel mundo que le deslumbraba y estaba empezando a conocer. Mientras uno de los vates del franquismo, José García Nieto, a pesar de haberle prometido su amistad, ignoraba sistemáticamente sus cartas, mostrándole los prejuicios del endiosamiento, otro escritor mucho más valioso, Alfonso Camín, consagrado en Sudamérica, pero que en España permanecía relegado por sus ideas republicanas, le recibía como a un igual sin pedirle nada a cambio.
Aquel día, el barco que traía al poeta y a su mujer Rosario Armesto desde el exilio mexicano llegaba a Gijón con las primeras luces del amanecer y para poder estar allí cuando pisase tierra, Albino tuvo que convencer a un amigo para que lo dejase subir en el furgón de un tren de mercancías que unía Laviana con la estación de la ciudad costera; luego un taxi hizo el resto y los dos hombres, el maestro consagrado y el aprendiz, que ya venían manteniendo una fluida correspondencia, pudieron conocerse en persona.

 Camín, junto a su hermano Corsino y su biógrafo asturiano, Albino Suárez, el día de su regreso a Asturias (1967). La Nueva España.

Alfonso Camín Meana tenía entonces 77 años y retornaba dispuesto a pasar sus últimos años en Asturias sin más bagaje que su dilatada carrera como escritor y las cajas de libros que pensaba vender aquí para financiar su estancia; también llevaba bajo el brazo una nueva obra «Don Suero de Quiñones o el caballero leonés» y la esperanza de ser profeta en su tierra.
El poeta había nacido en la aldea gijonesa de La Peñuca, en Roces, el 12 de agosto de 1890 y su biografía estaba llena de cicatrices. Su adolescencia como trabajador en una cantera de Contrueces se había cortado bruscamente a consecuencia de una reyerta, con un adulto al que llamaban «El Rata». En aquella pelea su navaja había sido la más rápida, pero sus padres para evitar los males mayores de la previsible venganza le enviaron a Cuba. Una huida que fue fructífera porque allí, aunque tuvo que ganarse la vida como vendedor y conoció la cárcel a causa de su carácter pendenciero, no tardó en publicar su primer libro de versos «Adelfas» en 1913 y dirigió la revista «Apolo» mientras trabajaba en la redacción de los periódicos isleños «La Noche» y «Diario de la Marina», que le envió a España como corresponsal durante la Primera Guerra Mundial.
Cuando llegó la paz volvió a Cuba, y de allí pasó a México, donde pudo tratar a Pancho Villa, pero dedicado ya de pleno a la literatura y sin cesar de publicar libros que eran esperados ansiosamente por el público. En 1929 nació la revista «Norte», editada inicialmente en España y luego en México, seguramente su obra más querida, que se iba a prolongar en el tiempo como un diario poético de su existencia durante treinta y dos años, y de nuevo en Madrid pudo vivir durante la II República el periodo más fructífero de la cultura española y conocer a Rosario, la segunda y definitiva mujer de su vida, que ya no le dejaría nunca.
Con ella retornó a América -de nuevo a Cuba y a México- cuando estalló la Guerra Civil, para empezar a andar el camino de la poesía afro-antillana, publicando decenas de libros, aunque sin olvidar sus raíces asturianas, como dejó claro al editar en 1940 una antología de la obra de Teodoro Cuesta. Albino Suárez contó en alguna ocasión como uno de sus poemas de aquella época «Macorina» alcanzó fama mundial gracias a la versión musicada de Chavela Vargas -que seguramente ustedes han oído alguna vez-, pero ella tardó en decir que la letra no era suya, a pesar de de las advertencias de Camín, hasta que el autor, después de avisarla varias veces de palabra, tuvo que hacerlo enarbolando el bastón que siempre le acompañaba. Desde aquella ocasión la intérprete siempre puso cuidado en aclarar este dato.
Volviendo a aquel 1967, Alfonso Camín no tardó en darse cuenta de que en Asturias iba a tener dificultades para poder pasar sin apuros económicos sus últimos años y decidió instalarse en Madrid, donde el Centro Asturiano de Madrid le ayudó a superar las trabas que en aquel momento le acarreaba su pasado político.
                        En el capitol de Mieres hoenaje 1969

Mientras tanto, en esta tierra se recuperaba poco a poco su figura. El 13 de junio de 1969, la Asociación «Amigos de Mieres» organizó en su honor en el Teatro Capitol de esta villa un festival artístico, que pudo celebrarse a pesar de los informes de la brigada Político Social que calificaba al escritor como «un elemento que desde su juventud se distinguió por sus costumbres de vida libre y bohemia, con pocos escrúpulos en el orden moral y posteriormente por su ideología marxista y furibunda desafección al Régimen y a su jefe de Estado».
A pesar de aquella enloquecida acusación, el acto pudo celebrarse con un gran éxito de público, que acudió atraído más por la faceta reivindicativa del poeta, acrecentada por la acusación policial, que por su trabajo con los versos, y, cuando la velada concluyó, tanto los organizadores como un sorprendido José Ramón Alonso «La voz de oro de Langreo», que actuaba como presentador, tuvieron que prestar declaración en la comisaría local. Con todo, los organizadores de la función se comprometieron a ir vendiendo sus libros, que quedaron depositados en los locales de la Asociación, aunque seguramente con poco empeño, ya que, pasados unos años, los montones de ejemplares apenas se habían tocado.
Entretanto, el poeta se aislaba cada vez más en su aldea gijonesa, casi ajeno al reconocimiento que empezaba a recibir su figura. Se le concedieron varios premios mientras la policía franquista seguía controlando sus pasos y ponía trabas a los actos que se iban organizando en su honor, aunque con el tiempo aquella presión acabó disminuyendo y afortunadamente pudo disfrutar del homenaje de diferentes instituciones.
Pero los galardones nunca llegaron acompañados del complemento económico que tanto necesitaba: la «Cátedra Jovellanos» del Centro Asturiano de Madrid le concedió la «Manzana de Oro»; Gijón y Oviedo dieron su nombre a sendas calles; en el Campo de San Francisco se levantó un monumento con unos versos suyos y a instancias de la Diputación se le concedió el título honorario de «poeta de Asturias», todo ello sin un acompañamiento monetario.
El 2 de enero de 1978, el Teatro Capitol volvió a ser escenario de un nuevo homenaje en el seno de la III Andecha de la poesía bable, convocada por Radio Oviedo, la Sociedad de Festejos del Carmen y los bablistas más populares de aquellos años: Lorenzo Novo Mier, José León Delestal y Julián Burgos, aunque entonces fueron muchos menos los mierenses que acudieron a respaldar aquel acto puramente literario en el que Camín recibió uno de los galardones que se otorgaban, antes de volver a su refugio gijonés.
Los últimos años de Alfonso Camín no fueron fáciles porque su carácter bohemio no le había dejado preparar la vejez. Algunos amigos lo ayudaron a la hora de rellenar solicitudes para ayudas o pensiones que nunca llegaban, vendiendo o adquiriendo sus libros, como fue el caso del citado Julián Burgos que adquirió lotes de sus obras para donarlas después a todas las bibliotecas del concejo mierense.

  Una de las ultimas imágenes de Alfonso Camín en 1982.

Su alejamiento de los círculos académicos hizo que algunos profesores universitarios como el académico José María Martínez Cachero lo considerasen un poeta menor, pero a su pesar acabó teniendo el reconocimiento popular y en 1981 fue nombrado Poeta de Asturias e Hijo Predilecto de la región. Aquel año, hizo una de sus últimas apariciones públicas, cuando la Fundación Príncipe de Asturias, aprovechándose de su avanzada edad, lo llevó hasta Oviedo para que saludase a los Reyes de España.
Entonces alguien recordó su inquebrantable convicción republicana y como en una ocasión, cuando Ramón Pérez de Ayala y él se cruzaron desde la plataforma de un tranvía madrileño con una comitiva en la que iba el Rey Alfonso XIII, mientras el primero se quitó el sombrero en señal de saludo, Camín supo dirigir su mirada hacia otro lado para evitar la reverencia.
El 12 de diciembre de 1982, el poeta astur-caribeño falleció en su casa de Porceyo, donde su esposa Rosario le cuidó hasta el último momento. Tenía noventa y dos años de edad y ella no tardó en acompañarlo. Ambos están enterrados en el cementerio de San Félix, en Porceyo (Gijón) donde cada año el Ateneo Republicano de Asturias le rinde homenaje.
Albino Suárez, su discípulo más fiel, nunca falta a esa cita para honrar al hombre que creyó en él y le enseñó a ser poeta.


FUENTE: Ernesto Burgos - Historiador
__________________________________________________

Biografía Alfonso Camín.

 https://sites.google.com 

Datos biográficos de Alfonso Camín.

Alfonso Camín Meana (Roces, 12 de agosto de 1890 - Porceyo, 12 de diciembre de 1982), llega a La Habana el 4 de octubre de 1905. Se inicia en el periodismo en Santiago de Cuba en 1911, colaborando en “El Cubano Libre” y en “El Liberal”. 

                  Alfonso Camín con 18 años.

En su primera etapa en La Habana, colabora de vez en cuando en el “Diario Español”,  en la calle Muralla, entre Cristo y Bernaza. Al no encontrar un ambiente propicio a su empeño, marcha a Cienfuegos. Vende cortes de trajes para hombres, y de más prendas varoniles, sigue su bohemia con Hilarión Cabrisas. El poeta cubano Cabrisas era entonces químico de una fábrica de jabones, cronista social; vestía como un gentleman y acaba pobre. Camín con pocos recursos funda en Cienfuegos la revista “Tierrina”, con fondos asturianos. Dura pocos meses.

Vuelve a La Habana por la publicación de su primer poemario: Adelfas, 1913. Entra en la plantilla del “Diario Español”, y poco después en el “Diario de la Marina”, que fue fundado en 1839, por el gallego Isidoro Araujo Alcalde. Uno de los primeros trabajos que publicó Camín en el “Diario de la Marina” era una composición poética de estilo patriótico alusiva al Marruecos de la época, que mucho llamó la atención a los hombres de España y algunos escritores de la Isla. También escribe reportajes extraordinarios: “La Huelga de los Carretoneros” y “El Crimen del parque Trillo” Este crimen le inspiró el poema: “La Muerta” que pertenece a Alabastros 1920. 
En 1915, en La Habana, funda Camín la revista “Apolo” En esta revista colaboran, entre otros: Federico Ibarzábal, Luis G. Urbina, Ricardo Arenales, José Santos Chocano, Manuel Carbonell, Arturo Doreste y Agustín Acosta. Pero en ese mismo año parte para Madrid, vía Nueva York. En Madrid colabora en “El Liberal” dirigido por Alfredo Vicenti, también en “Los Lunes del Imparcial”, en “El Bólido”, además en “La Esfera” y “Nuevo Mundo”
Vuelve a La Habana, escribe en el “Diario de la Marina”. Al poco tiempo se traslada como redactor al periódico “La Noche”, dirigido por Antonio Iraizoz (La Habana, 1890-1976).  Este importante intelectual cubano es el prologuista de la tercera edición de Adelfas 1959. Fundó y dirigió “Patria” (en su segunda etapa). Fue director de “Alerta” y “La Noche” --donde además ocupó la jefatura de información--, y trabajó como redactor en “La Prensa”, “Diario de la Marina”, “El Mundo” y “El Siglo”. Miembro de la Academia Nacional de Artes y Letras, de la Academia de la Historia de Cuba y de la Academia Cubana de la Lengua.
Camín, en 1916 visita México. Allí colabora con “Revista de Revistas” que dirigía José de J. Núñez  y Domínguez, además en el suplemento dominical de “El Universal”. Después de algún número en “Rojo y Gualda” Camín funda la revista “Castillos y Leones”. 

 Camín, a la izquierda, junto a su padre, Manuel, en 1929 en la plaza del Marqués, en Gijón. (La Nueva España)

Unos años más tarde, a raíz de los éxitos en “La Esfera”, y coincidiendo con la Exposición Hispanoamericana de Sevilla, en 1929, Camín funda la revista Norte en Madrid, para extender la voz de las provincias del Norte en Castilla y flámula de los emigrantes de estas provincias a los países de América Latina.  La revista se extiende a La Mancha, León, Palencia, Salamanca y Andalucía, con números extraordinarios en Sevilla y Huelva.
Abordó en el periodismo, la entrevista, la crónica de sucesos,  el reportaje… Camín hizo crónicas, reportajes y noticias policiales y de juzgado, llevaría también las noticias del Senado y La Cámara de Representantes.
En 1937,  a su regreso a México, continúa con la revista Norte, que se extendió a Venezuela, Puerto Rico, Colombia, Nicaragua, Argentina y Cuba, con algunas incursiones en el norte de los Estados Unidos. 

Camín en México mantuvo la revista Norte hasta el año 1967, año en que regresa a España. El último número de la revista Norte bajo la dirección de Camín fue el número  217, correspondiente al año 1967 y a  los meses Abril-Mayo.
En 1982, el 12 de diciembre, fallecía a la edad de 92 años el poeta de Asturias, un año después de haber sido distinguido con el título de “Poeta de Asturias” e “Hijo Predilecto”, nombramientos que fueron acordados por la Diputación Provincial de Asturias.
Sus restos descansan en el Cementerio Parroquial de Porceyo, Asturias. 





Arriba, siempre arriba   
Lira Errante 1964, México

Arriba, siempre hacia arriba,
como la nieve en la cumbre,
como el águila en los cielos
como la estrella y la nube.
Arriba, siempre hacia arriba,
como el castaño, que nutre
con el fruto al buen vecino
y está hueco y no sucumbe.
Como el roble a contraviento,
como las alas y el numen;
ser como el tigre que asalta
y como el león que ruge.
Arriba, siempre hacia arriba,
como el mar que al peñón cubre;
ser vencedor aún vencido,
ser en el carbón la lumbre.
En Trafalgar como Nelson
o ser Gravina en resumen;
ser en torno de La Habana
el coronel Aranguren.
Drake, terror del Caribe,
hundiéndose con su buque;
ser en Canarias el Teide
que hasta las estrellas sube.
En  Cuba el Pico Turquino,
ser en Puerto Rico El Yunque;
en México el Orizaba
y el Cerro de Guadalupe.
Arriba, siempre hacia arriba,
como la Luna aún inmune:
como el Sol, rey del espacio,
como la estrella, que fulge.
Arriba, siempre hacia arriba,
como el Naranjo de Bulnes:
abajo pasan los osos
y arriba pasan las nubes.
             ***
Arriba, siempre hacia arriba,
donde Jesús sangra y sufre
colgado entre dos ladrones
a la romana costumbre.
Huya entre la sombra Judas.
Poncio Pilatos se asuste,
¡ser la centella y el rayo
para alumbrar las Tres Cruces!

Libros publicados por Alfonso Camín.

 
Libros publicados por Alfonso Camín
(Entre 1913-1967)
. Adelfas 1913, La Habana
. Crepúsculos de oro 1914, La  Habana
. Cien Sonetos 1915, La Habana
. La Ruta 1916, Madrid
. De la Asturias simbólica 1917, La Habana
. De la Asturias simbólica (Segunda edición) 1918, México
. ¿Quosque Tándem…?  1918, México
. Adelfas (Segunda edición) 1920, México
. Alabastros 1920, México
. Hombres de España 1923, Madrid
. La moza del castañar (Novela asturiana) 1923, Madrid
. Hombres de España y  América (Edición especial) 1925, La Habana
. De la Asturias simbólica y nuevos poemas (Tercera edición, corregida y aumentada) 1925, Madrid
. La Carmona (Novela asturiana) 1925, Madrid
. Carteles 1926, Madrid
. Los Hombres y los Días 1927, Madrid
. La Pícara Molinera (Teatro en colaboración con Asenjo y Torres de Álamo y el maestro Luna) 1927, Madrid
. Entre volcanes (Novela de la Revolución Mexicana) 1928, Madrid
. Xóchitl  y otros poemas 1929, Madrid
. Antología Poética 1930, Madrid
. Carey” (Poemas de Cuba) 1931, Madrid
. La Pregonada  (Novela Asturiana) 1932, Madrid
. La Danza Prima 1932, Madrid
. Cien sonetos (Segunda edición) 1932, Madrid
. Los poemas del Indio Juan Diego (Poesías mexicanas) 1934, México
. El Gallo de Mateón (Cuentos asturianos) 1934, Madrid
. Los poemas Lozanos 1935, Madrid
. España a Hierro y Fuego 1938, México
. El Valle Negro  (Asturias, 1934) 1938, México
. Poemas para niños de 14 años 1938, Madrid
. Romancero de la Guerra 1939, México
. Águilas de Covadonga 1940, México
. Lienzos de España 1941, México  
. Los poemas del Destierro y Nuevo Romancero Asturiano 1942, México
. Mar y Viento 1943, México
. Tonadas en la neblina 1943, México
. De Estrabón al Rey Pelayo 1944, México
. Los poemas de Rosario 1944, México
. El Adelantado de la Florida (Pedro Menéndez de Avilés) 1944, México
. La Mariscala o el Verdadero Bobes (Biografía novelada) 1945, México
. Juan de la Cosa (Viajes y hechos extraordinarios del Gran Marino de Cantabria) 1945, México
. Carey y nuevos poemas (Segunda edición) 1945, México
. Son de gaita y otras canciones 1946, México
. Los poemas de México (Antología) 1947, México
. Últimos Cantos de la Guerra 1948, México
. El retorno a la tierra (Poesías asturianas) 1948, México
. Castillos y Leones 1948,  México
. Alabastros y nuevos poemas 1949, México
. Canciones y pequeños poemas 1949, México
. Apolo y la Rosas 1950,  México
. España y sus Hombres (Biografía) 1950, México
. Carbones y otros retratos 1952, México
. Entre Manzanos (Niñez por duros caminos. Primer tomo de Memorias) 1952, México
. Maracas 1952, México
. La Copa y la Sed 1954, México
. Fantoches 1954, México
. La Danza Prima y nuevos poemas 1954, México
. Los Buitres 1954, México
. Los poemas de Madrid (A Rosario) 1955, México
. Cien Sonetos y cien más 1955, México
. Al son del agua 1956, México
. Estafermos 1956, México
. América y sus Hombres (Biografía s) 1957, México
. Entre Palmeras (Vidas emigrantes. Segundo tomo de Memorias) 1958, México
. Carteles y nuevos poemas 1958, México
. Momentos 1958, México 
. Lienzos de España y nuevos motivos del Museo del Prado 1959,  México
. Adelfas y nuevos poemas 1959, México
. La fuente, el río y el mar 1960, México
. Azor 1961, México
. El Mundo y sus Hombres (Biografías) 1962, México
. Los emigrantes y Cronicón del Palacio de Contrueces) 1962, México
. El Collar de la Emperatriz (Cuatro Novelas Hispano-Americanas) 1962, México
. Lira Errante 1964, México
. Antología poética asturiana en castellano 1965, México
. La Ruta y nuevos poemas 1965, México
. Don Suero de Quiñones o el Caballero Leones (De cómo encontró Cervantes la figura de Don Quijote) 1967, México.

La obra inédita de Alfonso Camín.

La obra inédita de Alfonso Camín
La obra inédita que Alfonso Camín legó al Principado de Asturias y que se encuentra  como patrimonio cultural y literario asturiano en la Biblioteca de Asturias “Ramón Pérez de Ayala”, está registrada en el “Catálogo del legado de Alfonso Camín”, inventario realizado por Antonio Fernández Fernández, a instancia de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, del Principado de Asturias en el año 1986.
Resumen del inventario: 
LOS LIBROS
Contiene un ejemplar de cada libro editado por Alfonso Camín. Total de libros: 87.
LAS REVISTAS “NORTE” (“CUATRO” VIENTOS”, SEGUNDA ÉPOCA DE “NORTE”), Y “AMBOS MUNDOS”
Son 218 números de revistas entre los años 1929-1977, distribuidos en 8 carpetas.
LAS BOLSAS DE ARCHIVO (Obra inédita, trabajos en preparación, y papelería)
Las Bolsas de Archivo contienen carpetas o sobres, para un total de 21 bolsas.

  1. “Entre Madroños” (Tercer tomo de sus memorias)
  2. “Entre Madroños” (Tercer tomo de sus memorias)
  3. “Entre Madroños” (Tercer tomo de sus memorias)
  4. “Entre Nopales” (Cuatro tomo de sus memorias)
  5. “Entre Nopales” (Cuatro tomo de sus memorias)
  6. “Entre Nopales” (Cuatro tomo de sus memorias)
  7. Por tierras de Pancho Villa
  8. Lo que me contó el oso
  9. Crónicas de “Ambos Mundos” (Hecho Cerrado)
  10. “Canciones de mocedad y otros poemas”
  11. Novelas y Películas Asturianas
  12. Pedro Castaño
  13. “Crepúsculos de Oro”
  14. “Quosque Tándem? y otros poemas”
  15. Antruejos
  16. La tejedora de Urbies
  17. El Obispo Gelmirez
  18. Episodios: Los indianos en España y cosas de Asturias 1930
  19. Por ella me fui a la bola. Cine
  20. Legazpi
  21. Artículos de Alfonso Camín y Cuentos 

La obra poética Alfonso Camín

La obra poética de Alfonso Camín
Es la obra poética de Alfonso Camín (Roces-1890 -Porceyo-1982), “Poeta de Asturias”, una obra singular dentro de la Literatura española del siglo XX. Sin entrar a analizar su obra en prosa (novela, cuento, teatro, ensayo, entrevista, reportajes y artículos) su producción en verso es gigantesca. En más de 50 poemarios publicados, y en poemarios y poemas inéditos, Camín dejó constancia de más de 5000 poemas. De una temática diversa y envidiable, su obra es digna de un profundo análisis y depuración. Esta agrupación y alineación requiere, además, un trabajo largo y constante, debido a que el 80 por ciento de esos 5000 poemas, aún agrupados en poemarios, no se encuentran ordenados por temas, acentos, rigor o complacencia estética.
La Asociación Literaria Alfonso Camín integra los estudios, actuaciones, ediciones y actividades que generarán un cambio en la proyección de la obra de Camín, actualizando y optimizando su legado literario.
A primera vista, pudiera parecer que, adentrarse en la obra de unos de los poetas españoles que más apoyo tuvo por la parte de la crítica literaria hispanoamericana de la primera mitad del siglo XX, y que convivió con las generaciones poéticas del 14, 27, 36 y 50, resulta a estas alturas, un ejercicio retórico o nada inusual. Sin embargo la obra poética de Alfonso Camín, aún con lo extensa y diversa, no ha recibido los primeros criterios por parte de la crítica literaria.
Nuestro “Primer acercamiento crítico a la obra poética de Alfonso Camín”, permite una base que marca el inicio de un camino riguroso, de trabajo constante, que analice, ordene, depure y divulgue la obra poética de Alfonso Camín, tanto la publicada como la inédita. 

La diversidad de la poética Caminiana

La diversidad de la poética caminiana
Alfonso Camín nombra frecuentemente en su discurso poético, países, zonas, lugares, hechos históricos, guerras, anécdotas, obras de arte, personajes reales o ficticios, famosos, reyes, papas, hidalgos, princesas, caballeros, titanes, guerreros, piratas, políticos, intelectuales, artistas, escritores, poetas, pintores, etc.; lo hace en estampas, semblanzas, retratos, impresiones, arrebatos, diatribas, sueños, ideales; asistiendo la lírica,  la canción popular, el cantar del surco, el de la majada, el del mar, el de la mina, el del llano y el de la sierra, para cantarle al hombre, al pobre, al campesino, al indio, al negro, al mulato, al chino….; y lo hace desde la diversidad en la composición (tercetos, cuartetos, sextinas, serventesios, redondillas, octava real y octavilla, sonetos, sonetillos, espinelas, romance, verso estrófico, silvas) pasando por los ejercicios del ritmo (la variedad de metros, la entonación, liquidez, repentismo, ritmo interior, encabalgamientos, el epíteto como ejercicio medular, el hipérbaton ilustrado, y la aliteración marcada a veces desde lo culto, a veces desde lo popular, entre otros), hasta la aplicación de los referentes bélicos, históricos, religiosos, sociales, artísticos, geográficos y culturales, que actúan como demarcaciones de los atributos al símbolo poético, y no como pura decoración de mercado fetichista.
En la obra poética de Alfonso Camín existe un hilo regidor, al mismo tiempo sutil y crudo, por donde pasa sin desgastarse lo más genuino del alma asturiana y española: lo popular, lo aventurero -y lo más esencial de los países hispanoamericanos, además de la profundización étnica y cultural en Cuba y México- con ciertos tintes senequistas o krausistas (no hay que olvidar que Camín es español y cristiano, pero alejado del dogma) que vierten siempre el contenido humano y la fuerza de la Naturaleza dejando modelos poéticos que logran conformar un estilo. 

La poesía asturiana de Alfonso Camín 
Alfonso Camín llega a La Habana en 1905. Al cabo de diez años viaja a España, era el año 1915. Esta visita se prolonga hasta 1917 que  regresa a Cuba. Ese mismo año publica en La Habana su poemario De la Asturias simbólica. En los dos años de estancia en España el poeta asturiano retoma entonces el acento ibérico con sus cántaros y tonalidades. Se reincorporan además a su verso, el paisaje ibérico y el rumor de los manantiales de la infancia.
En 1917 Camín le canta a Asturias (De la Asturias simbólica, La Habana, 1917). Y no sólo canta, también reordena y corrige varios poemas de temática asturiana que fueron publicados en Crepúsculos de Oro, La Habana, 1914, y La Ruta, Madrid, 1916.
A partir de entonces Camín no dejó de crecer como poeta y no apartó a Asturias nunca de su canto. Siempre el numen astur lo llevó en su diestra.
Alfonso Camín es el poeta que con más profundidad y extensión le ha cantado a Asturias. Asturias tiene su estilo castellano particular, y Camín le saca bríos a ese intrincado y sólido cogollo del alma de la vieja Castilla que flota en Asturias, para dejar poemas de una factura franca,  donde el verso puro y pintoresco se hinca en la tierra, penetra y fecunda la savia vital de una raza, una cultura y una tradición. Este estilo de Camín se fragua del  espíritu de la montaña, del mar, de la mina, de los riscos y la neblina. Estilo donde aparece el sentir y el pensar del hombre de aquellas zonas, sus alegrías, su disposición a la tierra y su constancia de lucha y subsistencia. En este estilo la melancolía lleva su cuota, como la llevan también la hospitalidad, la niñez pobre pero grata. Estilo que es también pintura, semblanzas, acuarelas, retratos, donde se dan cita el roble y el castaño, la vacada, el hórreo, el manantial, el río y el mar, la moza, la sidra,  la mina, el mirlo, el águila, el oso, los paisajes de las bellezas reales, y todo al son de la tonada, el tambor y la gaita, donde el verso se hace fiesta  y distinción, y también arrullo musical para la nostalgia, el dolor y la esperanza.  Estilo que lleva el sello del emigrante, porque también la emigración es una identidad de Asturias; en ese canto Camín perfila la lejanía, los arribos a tierra extraña para sembrar hórreos lejanos, gaitas que distantes asisten a la cultura donde se afincan y van extendiendo el magisterio del idioma, el yunque de los hombres fuertes y laboriosos, la sidra para una sed de lejanía. Logra Camín en la poesía asturiana hacer de lo rústico, el señorío. Abre un universo de colores con una paleta musical que despereza la palabra original y la hace vestirse de nuevo. Sus versos andan pletóricos de cunas asturianas, desde Roces, en esa esponjosa ambientación de los verdes húmedos que acolchan el terreno asturiano, hasta la montaña caminada por el oso agrimensor, el Cantábrico y el Pajares… 
Todo lo que poetizó Alfonso Camín a Asturias es sentido, noble y hermoso.
No hay que olvidar que el espíritu poético de Camín estuvo de niño sobrevolando la humilde condición de aldeano. De ahí su “Asturias simbólica”, y todo el patrimonio poético con que vistió a Asturias.  

Poesía Cubana.

La Poesía afrocubana,  el Criollismo, y la Poesía cubana de Alfonso Camín
Alfonso Camín fue el primer poeta que convirtió al negro en un hecho literario. Camín escribió en 1925 su poema formal: Elogio de la Negra, e inmediatamente La Negra Panchita, que publicaron los periódicos de España (La Esfera), y Cuba (Diario de la Marina), entre otros. Toda la literatura con presencia del negro escrita en lengua castellana anterior a esos dos poemas de Camín está dada como un hecho de humanidad. A partir de Alfonso Camín el negro es un hecho literario.
En la poesía afrocubana el poeta asturiano vuelve su verso vibración al sentir el drama y también la belleza del negro en Cuba. Apresa el espacio negro en su cabal desenvolvimiento. Cuba aparece en toda su magnitud, en sus sombras y en sus claridades de colores, todas sus tonalidades, su ritmo evocador y contagioso, los frutos bajo el fuego tropical, los cañaverales, las vegas de tabaco, el guajiro con la décima y el tiple ardiendo tonadas bajo el surco sol del Trópico, el verdoso mar, sus cayos, las bahías, los puertos cenagosos y confiados, el manglar, los adoquines, las casonas y las cuarterías de La Habana, el Malecón, la Machina, el Canal de Vento, el Ariguanabo, el Almendares, el Arimao, Cienfuegos, los olores, Camagüey y Santiago, el perfume de mulata, los trajes, los colores de vestir, la guayabera, el dril blanco del número cien, la gracia típica, y también la presencia asturiana a lo largo de la isla, España en cada pueblo de Cuba, y el Chino, y el Jamaicano. Todo un mundo sensorial, perceptivo, a flor de vista, plástico, en movimiento continuo, de un dinamismo apasionado. Alfonso Camín colocó a la negra y a la mulata en el mismo sitial que a la blanca. Y no lo hizo a la fuerza, halló el estético lugar del origen, la formación de una nacionalidad que lleva esos tres colores de piel, y dispuso un canto bello, pero auténticamente humano, popular, verso para el hombre, para todo aquel que lea. La poesía popular cubana entre 1920 y 1960, apenas se distraía en el paisaje y seguía martillando su protesta desgarrada, su lucha social. La poesía cubana de Alfonso Camín aborda lo anterior, pero profundiza como pocos poetas en el paisaje campestre y en el citadino, hallando el color y los matices de la personalidad cubana de la primera mitad del siglo XX. 

Poesía Española.

La Poesía Española de Alfonso Camín
El territorio elemental del espacio poético de Alfonso Camín se abre en incontables temas, y entre ellos aparece de forma relevante su Poesía española.
Hallaba Camín en la palabra un instrumento musical y de armonía. Fue un hombre poseído por la poesía, hombre de la literatura, un creador verbal, un poeta de acento, de convulsión poética. Le dio color al sonido y sonorizó el color. Nuevos matices del sonido, del color y del sentimiento. Evolucionó la materia poética, el vocabulario, la métrica, y la magia peculiar de ciertos vocablos para abastecer los paisajes provincianos y regionales, pintados con lenguaje rítmico, palabras frescas, adjetivos inesperados y metáforas potentes y acometedoras, acercándose cada vez más a la escena popular.
Retrató el sentir de los pueblos y provincias de España, del campo, del hogar, de los trabajos, la siembra, las fiestas, los ocios y los vicios, las costumbres,  la tranquilidad íntima, además de sus tradiciones, historia y contexto social. 

Poesía Infantil y Juvenil.

La Poesía infantil y juvenil de Alfonso Camín
Entre la diversidad de géneros, formas, estrofas,  metros y temas, no escapa en la obra poética de Alfonso Camín la poesía para niños y jóvenes.
En el año 1938 Alfonso Camín publica en México el libro, Poemas para niños de catorces años. En él se recogen poemas de alta significación pedagógica sin que se conviertan en vehículos de carácter informativo, intelectual o de adoctrinamiento moral. Insiste el poeta en la actitud honrada y cívica que deben tener los hombres desde edades tempranas. Con un lenguaje sencillo, pero constantemente metafórico, Camín evoca distintos escenarios y situaciones que van desde la lección humana, el canto festivo, las canciones infantiles, la reflexión, hasta poemas con un tono más desgarrador o triste. Pero en todos ellos prima el amor y la honestidad, como vehículos de crecimiento humano. 
La poesía infantil de Alfonso Camín lleva ante todo el valor expresivo que le permite al niño la magia de la creación. Huye de la imagen o discurso infantiloide para exponer en sus poemas el predominio de la función poética que va más allá del lenguaje coloquial, convirtiendo el lenguaje poético en algo sugerente, original y creativo.
Camín no insiste tanto en la pedagogía del poema sino que prioriza en su discurso el milagro de lo maravilloso. Logra que en el poema el niño vaya a jugar al sueño, se deleite en el  libre juego de su fantasía.
Poemas ricos en sugestiones e incitaciones a conocer, a soñar, a buscar y a construir en un mundo siempre extraño y siempre en camino del descubrimiento.
Los poemas infantiles de Alfonso Camín tienen, la mayoría, más de sesenta años, y sin embargo no han envejecido, se descubre en ellos el sello de lo que perdura, la fragancia de la inocencia y el aprendizaje del niño que, aún con los avances científicos y tecnológicos de las últimas décadas, puede en estos poemas recibir el consejo prudente, la sensibilidad y el amor hacia la Naturaleza y el mundo que nos rodea. 
Alfonso Camín no sólo abordó la poesía infantil en el citado poemario sino que en varios de sus libros aparecen poemas dirigidos a los niños y jóvenes (Momentos 1958, Adelfas 1959 y Azor 1961, entre otros). Son poemas que convierten el verso en un  instrumento efectivo que genera un torrente de expresiones que logra recrear todos los valores de la vida.

Poesía Mexicana.

La poesía mexicana de Alfonso Camín
México, confluencia de los dos mundos, descomunal andén americano donde las culturas indígenas e hispana coincidieron. México, águila y raíz, generosidad, rigor y valentía. México, además de hogar para el poeta asturiano por 30 años, fue el inmenso escenario de múltiples colores, altos cielos, tradición patriótica, raíz indígena, cultura hispana, que abre un abanico de motivaciones geográficas, históricas, sociales y folklóricas donde Alfonso Camín penetró para cantar, a la altura de las grandes obras líricas y neopopulares mexicanas.

Poesía Mural.

La Poesía Mural de Alfonso Camín
La obra poética de Alfonso Camín es una obra multiforme, ataviada de colorido, tonos y matices. La armonía de su pincelada se manifiesta con verdadera maestría en su Poesía Mural. Poemarios como Lienzos de España 1941, México, y Lienzos de España y nuevos motivos del Museo del Prado 1959,  México, muestran la altura de su expresión y la hondura de su mirada. El concepto pictórico del poeta asturiano se manifiesta desde sus primeros libros. Ya en Cien Sonetos 1915, La Habana, en su muestrario de “Cabezas”, presenta semblantes de la personalidad íntima. Con cada personaje esboza el punto exacto del color, a cada uno su tonalidad, su vibración, a cada uno sus coloraciones, a cada uno su cromo.
En Alfonso Camín hay un poeta y un pintor. Lo demuestran no sólo sus Lienzos de España, sino también sus pinturas dentro de la Poesía asturiana, cubana y mexicana, y en otros temas y libros donde abarca la Mitología helénica y el Renacimiento italiano, este último, una de las bases fundamentales de su poética, donde ahondó en sus laberintos y en los símbolos del mundo renacentista.

Poesía Satírica.

La Sátira en Alfonso Camín
La propia personalidad poética de Camín lo lleva al ejercicio de la sátira. Su verbo, punzante, enérgico y viril le abastecen de una fuerza que en la sátira encuentra un medio propicio para ejercer la denuncia social, y también un arma de defensa para aquellos que en su círculo cercano intentaron atacar y vejar el camino literario y periodístico del poeta asturiano.
Respecto a la fuerza y vigor del verbo de Camín, Antonio Iraizoz escribió: “Bajo el signo de nuestras palmeras, el insumiso emigrante supo de las infinitas angustias de quien se ve solo, sin afectos, sin amigos, en debate indeclinable  con otras gentes y con la propia Naturaleza. Miró a lo alto. Contempló las estrellas. Una luz misteriosa le iluminó el arpa que traía en silencio. Custodiando al poeta amoroso, sensual, de madrigales en la talanquera, las arrogancias de una musa épica que ponía en sus versos la sátira, la diatriba, hasta la injuria”.
En la formación autodidacta de Alfonso Camín estuvieron presentes las lecturas de los principales autores satíricos. Desde el Arcipreste de Hita a varios autores de la llamada lírica cancioneril del siglo XV, entre ellos los anónimos redactores de las Coplas de Mingo Revulgo y de las Coplas de la panadera.  Admirador de las obras sátiras de Lope de Vega. Hay referencias en la obra de Camín a las obras El Coloquio de los perros, y el Viaje del Parnaso, de Miguel de Cervantes. También bebió Camín de las sátiras feroces de Góngora y el legado extraordinario de Francisco de Quevedo. En igual sentido depuró las obras del siglo XVIII donde destacan Diego de Torres y Villarroel y Francisco José de Isla, y en la literatura francesa las obras de Voltaire. Indagó en la sátira mexicana del siglo XIX con su acercamiento a  Luis Espino (Spes in Livo), Rafael Dávila (La Rata güera), José Joaquín Fernández de Lizardi (El Pensador mexicano) y Pablo Villavicencio (El Payo del Rosario). De la sátira italiana, Juvenal y Persio, además de ser un profundo estudioso de la obra de Pietro Aretino (su teatro y los Sonetos Lujuriosos) conocido como "azote de príncipes".
Alfonso Camín es autor de tres poemarios que ofrecen un elevado contenido en el tratamiento de la ironía y el sarcasmo. Los libros son: Carbones y Otros Retratos 1952, México, Fantoches 1954, México, y Estafermos 1956, México, que constituyen una trilogía prácticamente única en la segunda mitad del siglo XX en España. El poeta asturiano cultivó la sátira no sólo en esos poemarios, pues existen muestras a lo largo de su obra poética.
El acento de Camín lleva siempre incorporado el sarcasmo. Unas veces en un primer plano, donde lo exhibe en su mayor dinamismo; y en otras oportunidades a manera de parodia o recreación burlesca, mezclados con la duda o con los contrastes cromáticos.
Podemos hablar de dos vertientes expresivas en la sátira. 
La primera es de cuidada realización estética, donde las costumbres y las conductas deshonestas son su principal diana, pero que no muestra de forma puramente real, sino que le imprime a la diatriba una posición plástica que invita a la contemplación, brindándonos más que anécdotas, ciertos tipos sociales deformados. Lleva esta primera vertiente de Camín algunos rasgos del esperpento de Ramón Valle-Inclán y otros poetas de la Generación del 98, como la animalización y las fusiones de figuras humanas y animales, la dominación del contraste; pero huye de la cosificación de los personajes, que no están reducidos a simples signos o muñecos. Tampoco distorsiona la escena exterior, como es costumbre en el esperpento del 98, sino que la naturaleza se presenta de telón muestrario. Las escenas  llevan cierta transparencia pero siempre cargada de la intención satírica bajo una lección moral que es la otra parte menos transparente. En la generación del 98 la idea de sátira se fusiona entre la grandeza y lo grotesco que se considera propio de la sociedad española. Camín apela más al sainete criollo, influencia que le llega de su propia realización del concepto estético en la Poesía Negra o Poesía Afrocubana, y a sus incursiones en la poesía mexicana, el folclore y el dolor indio. 

Romancero de la Guerra.

El Romancero de la Guerra de Alfonso Camín
El Romancero de la Guerra de Alfonso Camín está contenido en los siguientes poemarios: Romancero de la Guerra 1939, México; Los poemas del Destierro y Nuevo Romancero Asturiano 1942, México; Últimos Cantos de la Guerra 1948,  México; además de temáticas afines en los poemarios: Los Buitres 1954, México, y Lira Errante 1964, México, entre otros.
(Prólogo de Alfonso Camín a su poemario Los poemas del Destierro y Nuevo Romancero Asturiano 1942, México):  
Cartel
“Para los enemigos de la libertad, de la independencia de los pueblos y de los Derechos del Hombre -no los derechos de la bestia y de la fuerza bruta- este libro es completamente inactual. El hombre medio no quiere enfrentarse con la tragedia del mundo. Quiere borrón y cuenta nueva. No escarmienta en las barbas de su vecino. Presume que nunca llegará a él la tragedia. Y cuando la ve encima, como un derrumbe, imita al avestruz, que mete la cabeza debajo del ala. Para esos hombres sin honor que buscan un amo a toda costa, porque en cada uno de estos admiradores de lo monstruoso hay un déspota y un bufón, este libro es como la Santa Bárbara al lado del castillo crapuloso y suntuoso. Puede interrumpir las bacanales de Mesalina, los festines de Heliogábalo y las digestiones de Sancho. Inclusive desparramar por el páramo los muchos cerdos que sueña en su cubil el villano de La Mancha.
Me anima, en cambio, la esperanza de que sea, para los pueblos que quieren seguir siendo tales y para los hombres que no abjuren de su derecho a la vida, al honor, a la cultura, al pensamiento y a la libertad, una contribución a la victoria de estas humanas virtudes. Es un libro contra los tiranos, contra los bandoleros de honra, vidas y haciendas, contra los asesinos del espíritu, contra los monstruos que ensangrientan los cuatro viejos Continentes y aun aspiran a hacer del Continente de América otro lago de sangre y otra escombrera de cadáveres.
Contra ellos va mi libro, con todas sus consecuencias, como David contra Goliat, como la luz contra la sombra, la posta contra los lobos y el incendio contra la torre que ha desterrado a la cigüeña para convertirse en nido de grajos.
Yo sé que este libro no dará onzas ni lecho de plumas. Mi actitud tampoco es nueva. Es la misma que sostuvo Séneca frente a Nerón, mientras que los otros aplaudían las aberraciones y los malos versos del César. Lo demás ya se sabe. Séneca tiene que apurar su cicuta. Pero el déspota muere a manos de sus esclavos frente al incendio de Roma.”

¿Quiénes son los autores de esta recopilación?

Asociación Literaria Alfonso Camín
La “Asociación Literaria Alfonso Camín”, nace de una cosecha, una memoria que hay que salvaguardar. La obra literaria y periodística de Alfonso Camín es esa cosecha. Tenemos el convencimiento intelectual, adquirido en años de estudio y disfrute de la obra del “Poeta de Asturias”, de que Asturias posee un valiosísimo patrimonio cultural abandonado por décadas.
La poesía asturiana de Alfonso Camín es la cúspide mayor del verso asturiano. Es Alfonso Camín el precursor de la Poesía afrocubana. Estas dos obras poéticas, unidas a su aportaciones y evoluciones al Romance; su cultivo de la Espinela, que lo convierte en el mayor decimista español del siglo XX; el brío, acentos y estética que desbordó sobre el Soneto; su obra y contribuciones a la Poesía mexicana, a la esencia del indio, al criollismo y a la historia y la cultura cubana; la línea plástica y orquestal de su verso; sus aportaciones al Neopopularismo, además de una diversidad temática gigantesca, hacen de la obra poética de Alfonso Camín una de las más altas y privilegiadas de la Poesía en castellano del siglo XX. 
La Asociación parte de este patrimonio cultural asturiano para llevar a cabo un proyecto donde, ante todo, se materialice el derecho y la voluntad de la sociedad asturiana para con la obra caminiana.
La Asociación Literaria Alfonso Camín inicia en el año 2012 el “Proyecto para revitalizar la obra de Alfonso Camín” que integra los estudios, actuaciones, ediciones y actividades que podrán generar un cambio en la proyección de la obra de Camín, actualizando y optimizando su legado literario.
Nuestro “Primer acercamiento crítico a la obra poética de Alfonso Camín” (volumen de 1500 páginas, aún inédito)  permite una base que marcará el inicio de un camino riguroso, de trabajo constante, que analice, ordene, depure y divulgue la obra literaria del “Poeta de Asturias”, tanto la publicada como la inédita. 

Contacto.

Teléfono: 692 14 53 17
          
          La partida

Era yo un niño de alma blanca
cuando di al viento mi primer cantar,
y con el alba y el zurrón al hombro,
baje del monte familiar
hacia la costa donde me esperaban
la emoción del abismo y el abrazo del mar.
Atrás quedaba el monte abuelo,
la casa blanca como un vetusto palomar,
la higuera madre y el parral caduco,
el olor a resinas del pinar,
la barbechera y el oropel de alondras
y la copa opulenta del pomar,
y la sombra del castañedo
  y el corpulento robledal...
 _______________________________________________
 http://el.tesorodeoviedo.es

Fechas de la vida de Alfonso Camín

  • 1890: Nace en Roces (Gijón)
  • 1900: Trabajaba en una cantera y asistía a la escuela nocturna
  • 1905: Emigra a Cuba
  • 1913: Publica su primer libro Adelfas, tras haber fundado años antes la Revista La Tierrina, y haber escrito numerosos artículos y ensayos
  • 1914: Publica Crepúsculo de Oro y edita en la Habana Apolo (revista dedicada a la poesía)
  • 1915: Corresponsal en España del Diario de La Marina de Cuba, para la I Guerra Mundial
  • 1916: Publica La ruta en Madrid
  • 1917: Regresa a Cuba, donde vive algunos problemas
  • 1918: Viaja a México y reedita De la Asturias simbólica
  • 1919: Reedita Adelfas
  • 1920: Publica Alabastros y Quousque tandem ... ?
  • 1921: Regresa a España, donde colabora en presa y revistas literarias
  • 1923: Publica Hombres de España y La Moza del castañar
  • 1925: Regresa a Cuba y publica Hombres de España y America. Comienza a publicar «poesía negra», género del que es el primer iniciador. Reedita De la Asturias simbólica y aumenta La Carmona
  • 1926: Publica Carteles
  • 1927: Publica Los hombres y los días y La pícara molinera
  • 1928: Publica nuevos libros: Entre volcanes, La Esfera, etc.
  • 1929: Publica Xochitl y funda la Revista Norte
  • 1930: Publica una Antología poética
  • 1931: Publica Carey, poemas afrocubanos
  • 1932: Publica La pregonada, La danza prima y Cien sonetos
  • 1934: Publica Los poemas al indio Juan Diego y El gallo de Mateón. Va a Asturias con motivo de la Revolución del 34; allí escribe su libro El Valle Negro
  • 1935: Publica Los poemas lozanos y Pancho Villa
  • 1936: Detenido en Pola de Allande, encarcelado en Luarca
  • 1937: Huye de España a Cuba y luego a Méjico
  • 1938: Publica España a hierro y fuego, su gran obra El Valle Negro, y Poemas para niños de catorce años
  • 1939: Publica Romancero de la Guerra
  • 1940: Publica Águilas de Covadonga, sobre D. Pelayo y la Reconquista
  • 1941: Publica Lienzos de España, sobre los cuadros del Museo del Prado
  • 1942: Publica Los poemas del destierro
  • 1943: Publica Mar y viento y Las tonadas en la Neblina
  • 1944: Publica De Estrabón al rey Pelayo, Los poemas de Rosario y El adelantado de la Florida: Pedro Menéndez de Avilés
  • 1945: Publica La mariscala o el verdadero Bobes (biografía), y Juan de la Cosa (biografía sobre ese marino). Reedita Carey y nuevos poemas. Le hacen una oferta para un nombramiento en España, que rechaza.
  • 1946: Publica Son de gaita y otras canciones
  • 1947: Publica Los poemas de México
  • 1948: Publica El retorno a la Tierra, Últimos cantos de guerra y Castillos y leones
  • 1949: Publica Alabastros y nuevos poemas, y Canciones y nuevos poemas
  • 1950: Publica Apolo y las Rosas, y España y sus hombres (biografías)
  • 1952: Da a conocer Carbones y otros relatos (obra ocultada por satírica). Publica Entre manzanos (sus memorias) y Maracas
  • 1953: Invitado a Cuba en el centenario de Martí, donde colabora para crear el extraordinario de la Revista Norte
  • 1954: Publica La copa y la sed, Fantoches, Carbones, La danza prima (segunda edición), y Los buitres
  • 1955: Publica Los poemas de Madrid a Rosario, y Cien sonetos y cien más
  • 1956: Publica Al son del agua y Estafermos
  • 1957: Publica América y sus hombres (biografías)
  • 1958: Publica Entre palmeras (biografía), Momentos, y Carteles y nuevos poemas
  • 1959: Reedita Lienzos de España en edición aumentada. Publica Adelfas y nuevos poemas
  • 1960: Publica La fuente, el río y el mar
  • 1961: Publica Azor
  • 1962: Publica El mundo y sus hombres (biografías), Los emigrantes y Cronicón del Palacio de Contrueces, y El collar de la emperatriz (cuatro novelas)
  • 1964: Publica Lira errante
  • 1965: Publica Antología poética asturiana en castellano, y La ruta y nuevos poemas
  • 1967: Publica Don Suero de Quiñones o el Caballero Leonés (de cómo encontró Cervantes la figura de El Quijote). Regresa a Asturias con setenta y siente años, donde continuará con su obra creativa.
Como podemos ver, es uno de los mas prolíficos escritores del siglo XX, muy valorado en Hispanoamérica (aunque tristemente casi desconocido en nuestra tierra). Su obra, hasta su regreso a España, cubre más de una decenas de revistas y publicaciones fundadas o dirigidas, y alcanza casi el centenar de libro editados, algunos de ellos con más de 800 páginas (llenos de pensamiento, erudición, arte e historiografía). Es el precursor de la poesía llamada entonces Negra, hoy Afrocubana (actualmente denominada poesía Afroantillana) y fue elegido POETA DE ASTURIAS e Hijo Predilecto en 1981, tan solo un año antes de morir (fuente documental de biografía y obra: Albino Suárez Cortina, Alto Nalón).

Albino Suárez Cortina.

Poeta, amigo y discípulo de Alfonso Camín nacido en Pola de Laviana.
Inicialmente fue minero, pero su amor a las letras le convierte en escritor y uno de los mas fervorosos conservadores de la literatura popular asturiana. Vive actualmente en Pola de Laviana, donde desde 1983 dirigió la revista etnográfica y literaria Alto Nalón. Revista que hasta el año 2008 Albino Suárez consigue que perviva y donde se publican las obras y poemas de personalidades tan destacadas como Camín; a la vez que recoge la vida común y cultural de las cuencas mineras de Asturias (comprendiendo etnografía, folclore, mitología, leyendas o gastronomía de la cuenca del Nalón). Recibe por ello destacados galardones como el urogallo de bronce, el premio Alvarez Buylla o el de la Asociación de amigos de Mieres. Considerándose a Albino Suarez "Hombre de la Mancomunidad del Nalon" o "Escritor minero", recibiendo en Gijón el premio "Bravo del asturianismo". Poeta del pueblo, de Asturias y de las letras mas profundas, es Albino Suárez uno de los últimos ejemplos de la cultura del pueblo norteña (haciéndonos llegar aires del Regeneracionismo y de la generación del 27).

Alfonso Camín revive en Mieres

La Casa de Cultura de Mieres acogió un apasionado recital en homenaje al poeta en el 30.º aniversario de su muerte 

 Mieres del Camino, J. VIVAS


Ocho artistas sobre el escenario y un poeta ausente, Alfonso Camín. La Casa de Cultura de Mieres acogió en la noche de ayer el concierto poético-musical «Camín de Casa», una cita con la que rindió un cálido homenaje al escritor gijonés, muy ligado con villa mierense, con ocasión del treinta aniversario de su fallecimiento.

El espectáculo contó con la participación de la compañía «La Caravana del Verso», compuesta por el escritor lavianés Albino Suárez, discípulo y biógrafo de Alfonso Camín; Sandra Risueño, bailarina y coreógrafa; Cristina Rudolph, recitadora y cantante; los guitarristas María del Mar Alonso y Dani Coto; el cantautor Rafa Lorenzo; el poeta Felipe Prieto; y Joaquín de la Buelga, recitador y director de la compañía. El recital contó una breve muestra de poemas de Alfonso Camín en sus diferentes etapas, tanto durante sus estancias en Cuba y México, como en su regreso a Asturias. Los poemas fueron recitados con acompañamiento de música, danza con coreografías alusivas a los textos del autor y canciones inspiradas en Alfonso Camín y su trabajo. «Un emotivo espectáculo poético que Asturias le debía al poeta», tal y como aseguraron los miembros de «La Caravana del Verso». El recital «Camín de Casa» ya ha pasado con éxito por otras localidades de la región, como Laviana o Avilés, donde, al igual que en Mieres, el público recibió con aplausos a los miembros de esta compañía poética y musical.
 Con algo menos de medio aforo en el espacioso y acogedor Auditorio Municipal de Mieres, La Caravana del Verso encandiló con sus canciones, danzas y recitados caminianos, ante un público que salió satisfecho del recital de algo más de una hora de duración, el cuarto de esta gira "Camin de Casa" desde el que queremos seguir insistiendo, con nuestro arte y oficio, airear nuestras más preferidas estrofas del bardo de Roces, El Poeta de Asturias, Alfonso Camín.

Las fotos hechas por un espectador son un primer avance de las que hicieron otros muchos, entre ellos un vídeo que esperamos con impaciencia por los organizadores del evento, Radio Parpayuela, a la que, segun las propias palabras del Director de la Caravana, Joaquin de la Buelga, "estamos enormemente agradecidos por su apoyo y difusión, como a la Casa de Cultura, a y su Director Ismael G. Arias, y al Ayuntamiento mierense por darnos todas las facilidades para poder mostrar nuestro repertorio en la capital del Caudal..."

 Yo personalmente salí encantado y con muchas ganas de volver con mi nuevo disco bajo el brazo, también caminiano, "A hierro y fuego" a presentarlo en este excelente escenario, cuando la primavera trasiegue con los vapores estivales.

Rafa Lorenzo
La Caravana del Verso en Mieres




1 comentario:

  1. En triste abandono quedó el poeta. Pero ha de volver en todo su esplendor.

    ResponderEliminar