Los amantes de San Andrés
San Andrés en
Turón (Mieres). Ver Pueblos |
Ilustración de Alfonso Zapico |
Hace unos años, Quilino el de Polio me contó esta historia
de amor y muerte: la tragedia de dos jóvenes que prefirieron pasar unidos al
otro mundo en vez de vivir separados en éste. Quilino, paradigma de hombre
integro y solidario, es actualmente el mejor testigo de las luchas del siglo XX
en nuestras cuencas, pero a la vez guarda un sitio en su memoria para esos
otros acontecimientos que le transmitieron sus mayores y que no quiere que se
pierdan en el olvido. Uno de los protagonistas del drama fue un joven llamado
Casimiro, que en el momento del suceso contaba 26 años. Era hermano del abuelo
de Quilino y por eso en la familia siempre se guardó su recuerdo y el del
triste suceso que puso fin a su vida. Incluso su fotografía pudo sobrevivir al
paso del tiempo, pero faltaba encontrar la fecha del drama y, sobre todo,
ponerle nombre a la mujer que una mañana soleada, hace ya más de un siglo, unió
para siempre su sangre con la de su compañero.