El motín de las pescaderas
En mayo de 1898, una algarada popular
contra el impuesto del pescado y el precio del pan puso a la villa en
estado de sitio, mientras la escuadra de Filipinas era hundida en Cavite
A principios del mes de mayo de 1898 los ojos de los españoles
miraban hacia Cuba y las Filipinas, entonces aún territorios nacionales
(como Puerto Rico). El 25 de abril los Estados Unidos habían declarado
la guerra a España tras el oscuro hundimiento del buque de guerra
estadounidense «USS Maine» en el puerto de La Habana el 15 de febrero, y
sendas escuadras navales yanquis merodeaban por las costas cubanas y
filipinas. El 3 de mayo de hace 115 años los gijoneses podían leer en la
primera página del diario local «El Noroeste» el primer relato sobre la
destrucción, dos días antes, de la escuadra española con base en las
Filipinas frente a Cavite, en aguas de la bahía de Manila, pero también
era noticia «El motín de ayer» ocurrido en la villa, que era, sin duda,
más importante para los gijoneses. La mecha que había encendido el conflicto social había sido,
contó «El Noroeste», la «supresión de los exorbitantes derechos de
consumo que paga el pescado y muy señaladamente los mariscos». Y
apuntaba el diario local republicano: «Razonable, al par que justa, era
la petición, como lo era también la de rebaja del precio del pan, si
ordenadamente lo pidieran».
Los hechos, leemos en «El Noroeste», comenzaron «a las nueve de
la mañana» y fueron promovidos «por unas cuantas vendedoras de pescado
que protestaron del pago de los derechos de consumo que ellas
consideraban excesivos». Parece ser que «a soliviantar los ánimos
contribuyó también, según nuestras noticias, el hecho de que un cabo del
resguardo decomisó dos merluzas pequeñas que para su casa llevaba una
muchacha, a quien el dicho empleado exigía el pago de los derechos correspondientes». Ello unido, prosigue la información del diario republicano, «a
la natural odiosidad que el pueblo tiene al impuesto de consumos». De
cualquier forma, lo que aconteció fue que «las mujeres que habían
protestado primeramente obligaron a todas las vendedoras de pescado a
levantar sus puestos y a cerrar la plaza, como así lo hizo el
contratista». En 1898, la plaza del Pescado estaba situada sobre el mismo
Muro, frente a la Casa Consistorial y el mercado de San Lorenzo o del
Adobo, que en 1928 sería derribado para construir en el solar la nueva
Pescadería Municipal, hoy un edificio administrativo del Ayuntamiento.
|
|
Tras el cierre de la plaza del Pescado la cosa fue a más. Las
pescaderas se plantaron frente a la Casa Consistorial en busca del
alcalde, que era entonces Tomás Dimas García Cuesta. Como no lo
encontraron, subieron a Cimavilla «hasta la Fábrica de Tabacos, donde
pidieron que salieran las operarias para hacer causa común con las
manifestantes». Así fue, y relata «El Noroeste» que «transcurrió la
mañana, sin que el alcalde apareciese por ninguna parte, ni autoridad
alguna atendiese las peticiones de las mujeres ni procurase disuadirlas
de recorrer las calles». Pero en esto apareció don Tomás Dimas García Cuesta, quien «al
pasar por delante de la Pescadería, creyéndose aludido por dos mujeres
que no habían intervenido para nada en la manifestación, mandó
detenerlas».
|
La pescadería adosada al muro de San Lorenzo, hacia 1911, con las pescaderas vendiendo sus productos al aire libre. Foto Modesto Montoto. Muséu del Pueblu d’Asturies. http://gijonenelrecuerdo.elcomercio.es |
A partir de ahí los acontecimientos se precipitaron. «Desde
este momento se convirtió la manifestación en motín, y a pretesto (sic)
de pedir que se rebajara el precio del pan, se apostaron (los
manifestantes) delante de la fábrica de harinas del Sr. Zarracina, y
como si obedecieran todas a una consigna, comenzaron a arrojar piedras
al edificio, rompiendo los cristales de todas las ventanas (...) No
contentas con esto, encamináronse a la fábrica de vidrios, en donde
consiguieron sacar a las mujeres, y enseguida dirigiéronse a la casa
habitación del Sr. Zarracina, rompiendo también los cristales de los
miradores» («El Noroeste»). Tomás Zarracina era entonces uno de los industriales más
reputados de Gijón. Propietario de cinco fábricas de diferentes
productos, también era fundador y propietario de «El Noroeste».
|
Exterior del mercado de Pescado., Ruth Matilda Anderson, 1925. Saber más.....
|
Militante activo del bando republicano, Tomás Zarracina había fundado en
1890 la fábrica de harinas «La Caridad», que estaba situada en el
barrio del Tejedor (la actual calle del Doctor Bellmunt y adyacentes),
que producía al día unos 20.000 kilos de harina para consumo de los
mercados de Asturias, Galicia y América. Además, el republicano
Zarracina poseía fábricas de chocolates, de sidra achampagnada, de
aserrar maderas y una tahona, titulada «La Esperanza», que era la más
importante de Asturias, con una producción diaria de 5.000 kilos de pan. Pero, volvamos a las calles de Gijón el 2 de mayo de 1898: Los
manifestantes fueron luego a la calle Corrida, penetraron en la
administración de consumos y prendieron fuego «a la documentación y los
enseres de la oficina». Luego, hicieron lo mismo con el fielato del
Muelle y con la caseta del guardia del muelle de Fomento. Pero la cosa
fue a más «como a las cuatro y media» de la tarde, frente a la cárcel. Los amotinados exigieron la puesta en libertad de las mujeres
detenidas y también del director de «El Noroeste» que, contó su diario,
estaba arrestado «por decir las verdades». La cárcel, entonces, estaba
situada en Cimavilla, en el complejo de la torre del Reloj.
|
Restos de muralla romana, Torre del Reloj y Plazuela de Jovellanos. (www.pinterest.es) |
Llegado a este punto el motín, la intervención de la Guardia
Civil y de una sección de tropas de infantería «al mando del segundo
teniente Sr. Nespral» evitó el asalto de la cárcel, aunque «la
alteración del orden público duró hasta que el sueño u otras necesidades
apremiaron a los amotinados, obligándoles a retirase a sus casas». Fue un paréntesis. Al día siguiente, 3 de mayo, a partir de las
seis y media de la mañana, los amotinados volvieron a las calles
pidiendo apoyo a los obreros del Dique, de la fábrica de aceros, de loza
y otras. Y contó «El Noroeste» que «a medida que iban entrando en la
población, parecía que se enardecían más y más los ánimos». Hubo saqueos en varias empresas, especialmente del ramo de la
alimentación, y «el espectáculo era dolorosísimo. Las pérdidas causadas,
incalculables». A todo esto, «eran las once de la mañana, y al
conocerse en toda su extensión los desmanes que se habían efectuado, se
reunió inmenso gentío en los alrededores del Ayuntamiento», y «al poco
rato», leemos en «El Noroeste», apareció «el Sr. Gobernador, acompañado
de varios concejales interinos, aconsejando a la multitud que se
retirase y prometiéndoles que se accedería a la supresión del impuesto
de consumos sobre el pescado y se procuraría conseguir la rebaja del
precio del pan. La multitud comenzó entonces a vitorear al Sr.
Gobernador civil y a pedir la dimisión del alcalde».
|
|
Acuciado por las protestas, Tomás Dimas García Cuesta presentó
su dimisión como alcalde de Gijón. Lo había sido anteriormente entre
marzo de 1897 y enero de 1898. Su segundo mandato databa del 28 de
febrero de 1898. Nunca más volvería al sillón de la Alcaldía. Su sustituto, Francisco Prendes Pando, primer teniente de
Alcalde en funciones, de inmediato hizo publicar un bando en el que
informaba de que «oídas las reclamaciones formuladas por las Comisiones
de vecinos obreros de este pueblo, desde luego la Corporación municipal
atiende la de que queden suprimidos los derechos de Consumos que venía
satisfaciendo el pescado, y que promovida para hoy una sesión
extraordinaria bajo la presidencia del Ilmo. Gobernador civil de la
Provincia, se tomarán acuerdos para remediar en lo posible la creciente
carestía que viene sufriendo el pan». No obstante, la autoridad militar
decretó el estado de sitio.
|
La cárcel vieja de Gijón, que estaba situada en el complejo de la torre del Reloj, en Cimavilla. Archivo de juan martín merino, «juanele» (LNE) |
FUENTE: J. M. CEINOS. Publicado por La Nueva España el 25-04-2010. Ver enlace._______________________________________________________________________
AUTORES.
José María
Ceinos, periodista redactor de La nueva España, y buen conocedor de la Villa de
Jovellanos (Gijón).
LA NUEVA ESPAÑA ha sido testigo de la historia de
Asturias durante los últimos 80 años. El rigor y la calidad de la información
ha situado este medio de comunicación como el líder indiscutible, a gran distancia
de sus competidores, de la prensa escrita diaria en el Principado de Asturias.
LA NUEVA ESPAÑA es el periódico de referencia de Asturias, los asturianos de
todas las edades lo prefieren según reflejan todas las encuestas, y al elegirlo
cada día no sólo lo han confirmado como líder indiscutible de la prensa
asturiana, sino que lo han convertido en uno de los principales periódicos de
España, pues así lo expresan su difusión y su número de lectores. DELEGACIONES.
LA NUEVA ESPAÑA cuenta con 6 ediciones; General, Gijón, Avilés, Cuencas,
Oriente y Occidente, que se confeccionan en las redacciones de Oviedo, Gijón,
Avilés y Mieres y Langreo, a las que se suman una amplia red de
corresponsales. FUENTE.
EL BLOG DE ACEBEDO. (ANTOLOGÍA DE LA HISTORIA). La
Historia es una disciplina académica que aspira a comprender el pasado y la
forma en que se ha configurado el presente. Es necesaria para entender, para
cambiar y para saber cómo ha llegado a existir la sociedad en la que vivimos.“El único deber que tenemos con la historia es
reescribirla”. (Oscar Wilde)
El Blog de Acebedo se
adentra en la historia de nuestra tierra, TODO SOBRE ASTURIAS, MIERES Y
CONCEJO. navegar en este blog, es conocernos mejor a nosotros mismos y
nuestra dilatada historia. Como decía el poeta mierense Teodoro Cuesta
García-Ruiz (09/11/1829 – 01/02/1895), “soy d´esa villa y á honra tengo
haber nacío n’ella”. FUENTE. El Blog de Acebedo.
_____________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________
NOTA: Los nombres de los
autores aparecen en el pie de cada imagen o al final de cada artículo, si no es
así, se debe a que es un dato que se desconoce, así que, si algún autor la ve
en este blog, le rogamos que se ponga en contacto con “El Blog de Acebedo” para hacerlo
figurar o para borrarla si es su deseo, porque es justo reconocer a los
autores.
Si te ha interesado
esta entrada y quieres preguntar, comentar o aportar algo al respecto, puedes
dejar un comentario o escribir a mi dirección de “correo del blog” con la seguridad
de ser prontamente atendido.
¡¡¡Difunde “El blog de Acebedo” entre tus
amistades!!!
Sígueme en:
© - Facebook
- Roberto Cortina
© - Twitter
- El blog de Acebedo
© - El Blog de Acebedo
No hay comentarios:
Publicar un comentario