23 de marzo de 2013

Antonio Menéndez Peláez

El héroe asturiano de la aviación cubana
Antonio Menéndez Peláez. Fue el primer cubano en realizar la hazaña de sobrevolar el Océano Atlántico en el año 1936, desde Camaguey hasta Sevilla, España, en un avión monomotor de cabina abierta. (…). Saber más... EcuRed.

Cuba no lo ha olvidado. Los puentes simbólicos que conectan las dos orillas del Atlántico adquirieron un día de febrero de 1936 un sentido literal gracias a la audacia de un aviador asturiano
El aviador asturiano Antonio Menéndez Peláez. La Nueva España.
La Nueva España
Nacido en Los Veneros, parroquia de Riberas (Soto del Barco), Antonio Menéndez Peláez fue el primer piloto en volar en solitario de Cuba a España, de Camagüey a Sevilla en nueve etapas entre el 12 de enero y el 14 de febrero de hace ahora exactamente 75 años. Considerada una de las hazañas más importantes de la aviación cubana de todos los tiempos, sus «Bodas de platino» tuvieron su acto de conmemoración el mes pasado en la sede habanera de la Federación de Asociaciones Asturianas de Cuba (FAAC) y su respuesta, ayer, en el antiguo aeródromo de Tablada (Sevilla), punto de llegada de la travesía. Casi desapercibido en España, Menéndez Peláez (1898-1937) es uno de los héroes escondidos de la emigración asturiana, un sotobarquense de nombre oculto apodado «El águila asturiana» en algún relato de la época en Cuba. Menéndez Peláez salió de Asturias a los trece años y siguiendo los pasos de su padre se estableció en la provincia cubana de Cienfuegos, donde pronto se sintió atraído por la incipiente aeronáutica de principios de siglo, en plena «etapa romántica de la aviación mundial». 

16 de marzo de 2013

El mayor temporal registrado en Asturias (14 de febrero de 1888)

La nevadona...
Maquinas exploradoras abriéndose paso en Pajares y algunos peones de espalar. Xilografía publicada el 8 de abril de 1888 por La Ilustración Española y Americana. Saber más... Dialnet-Los Temporales De Nieve De l888 EnAsturias-6970775.pdf. https://dialnet.unirioja.es

Contaban que el invierno de 1882 había sido una bendición para las obras del ferrocarril de Pajares porque el cielo estuvo despejado durante meses favoreciendo los trabajos, pero que los vecinos del puerto, asustados por la sequía que amenazaba la supervivencia del ganado, se dirigieron a las iglesias rogando por la vuelta de la nieve, sin embargo, seis años después, hubieran dado cualquier cosa por poder volver atrás
Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
La Nueva España

Contemos la historia. Dicen que los agoreros ya venían anunciado la cosa porque algunas señales indicaban que en el ambiente se preparaba algo anormal: los vientos eran especialmente crudos, los animales andaban nerviosos en el puerto y se veían pasar bandadas de aves acuáticas volando hacia el Sur, algo que llamaba muchísimo la atención porque hasta entonces nunca lo habían hecho. Era como si huyesen de algo y al parecer tenían razón ya que el día 14 de febrero de 1888 se inició el mayor temporal registrado en Asturias. 

El sacerdote Feliciano Redondo en Avilés

Un cura entre rojos
Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
El Avilés a retaguardia de la Guerra Civil sirve de escenario para una historia singular del sacerdote Feliciano Redondo, que pasó refugiado entre los tabiques de una vivienda de la villa «quince meses inhábiles» durante la contienda
Feliciano Redondo, en los días de su estancia en Avilés. Infografía de Miguel de la Madrid. La Nueva España.
La Nueva España I y La Nueva España y II
Este hombre que posa descansando, como si estuviera en un jardín clásico, lectura a mano y ropa de paisano, no es tal cosa. Es un cura. Feliciano Redondo para más señas. Leonés de nacimiento, con la edad de Cristo recién cumplida y visitante ocasional de Avilés en un mes de julio del año 1936. No le pareció el mejor mes ni el mejor año para ser cura en Avilés. La visita se le hizo larga. Quince meses y tres días. Los mismos que aquí duró la última guerra civil, desde el 18 de julio de 1936 al 21 de octubre de 1937. Los recordó para siempre como «Quince meses inhábiles en Avilés». Era Feliciano Redondo un profesor del seminario de Valdediós a punto de iniciar sus vacaciones. Automóviles Luarca estaba en huelga y, para tomar el tren hacia León, la mejor combinación que se le presentó fue pasar la noche en Avilés, aceptando la invitación de un amigo. La agitación era máxima. En Oviedo circulaban noticias confusas: que si la Escuadra trae al Tercio, que si todas las guarniciones están complicadas e irán sumándose a la sublevación, que si Aranda toma posiciones. 

9 de marzo de 2013

Real Instituto de Estudios Asturianos

El RIDEA, historia de una apropiación  Actualizado el 09-05-2020
El Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA; en asturiano, Real Institutu d'Estudios Asturianos) es una entidad cultural autónoma de derecho público de la comunidad autónoma del Principado de Asturias. De acuerdo con el artículo 1.º de sus estatutos, tiene como objetivos «la investigación, el fomento y la orientación de los trabajos y estudios que tienden a conservar, elevar e incrementar el acervo científico, cultural y artístico del Principado de Asturias en todos sus aspectos y en los más específicamente asturianos». De Sitomon - Trabajo propio, CC BY-SA 2.5, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=1331016
Con la llegada de la democracia, la dirección del comenzó a ser electiva
El RIDEA, historia de una apropiación. https://www.lne.es/asturias/2010/04/19/ridea-historia-apropiacion/902776.html
http://www.lne.es
Durante los primeros tiempos de la transición se intentó presentar al Instituto de Estudios Asturianos o IDEA como una cueva de cavernícolas y reducto de la «cultura franquista». No me opongo a la primera consideración, pero sí a la segunda por la sencilla razón de que no hubo jamás cultura franquista, como tampoco hay «cultura socialista», del mismo modo que hay cultura cristiana o cultura renacentista, porque los regímenes políticos no dan para tanto. Bien es verdad que el socialismo siempre sintió mayor curiosidad hacia la cultura que el franquismo, pero esa curiosidad no pasó nunca de la pretensión de utilizarla como publicidad. Sentada la base de que el socialismo es «científico», no se puede anunciar de la misma manera que un detergente, pero sí utilizando los mismos procedimientos. La diferencia entre una señora guapa anunciando unas medias de seda y Pablo Neruda escribiendo la oda a Stalin se quiere presentar como una cuestión de calidad, pero digo yo que por qué ha de tener más calidad un verso de Neruda que unas medias de seda.