Ermesinda,
reina consorte de Asturias, por Francisco Joaquín Gutiérrez de la Vega. 1854
(Museo del Prado, Madrid). Saber más... WIKIPEDIA. |
Retrato de doña
Nuña, esposa del rey Ordoño I. (LNE) |
Frente a los trece monarcas que ocuparon el trono en los dos siglos de su vigencia, los textos más antiguos, las conocidas como "Crónicas asturianas", es decir, las dos versiones de la "Crónica de Alfonso III" (las llamadas "Rotense" y "Sebastianense" o "A Sebastián"), y la "Crónica Albeldense", sólo citan a tres reinas y lo hacen por su fundamental importancia en la transmisión de los derechos al trono.Ermesinda, la hija del rey Pelayo, es la primera mujer a la que las llamadas "Crónicas asturianas" citan por su nombre. Éste aparece escrito como Ermesinda en la "Rotense", y Bermesinda, en la "Crónica Albeldense", quizás por un error de copia de un previo Hermesinda. Su mención se explica por la importancia que tuvo su matrimonio con Alfonso, hijo del duque de Cantabria Pedro, que constituye el primer ejemplo de enlace político en la Monarquía Asturiana. Según la "Crónica Albeldense", la unión de Ermesinda con Alfonso se había realizado "por iniciativa del propio Pelayo", sin duda para sellar una estrecha alianza entre los dos pueblos o comunidades vecinas. Ese matrimonio tuvo una importancia trascendental, pues legitimó el linaje descendiente del duque de Cantabria, Pedro, en la sucesión en el trono de Asturias, lo que fue facilitado por la prematura muerte de su cuñado Favila, que despejó el camino de Alfonso I al trono astur.