23 de febrero de 2020

El agujero negro del 23 F

Los nombres del 23-F que pudieron cambiar la historia reciente española 
Imagen del coronel Tejero tomando el parlamento realizada por el periodista Manuel Pérez Barriopedro. 23-febrero de 1981. Todocolección
Muchos de ellos ya han fallecido, aunque otros, como Antonio Tejero, viven pero mantienen un silencio sepulcral en torno a uno de los hechos que más marco la historia reciente de España. El libro “23 F, la conjura de los necios”, revela muchas de las claves de esos nombres propios

LOS RESPONSABLES DEL GOLPE DE ESTADO. ALFONSO ARMADA Y COMYN (1920-2013). General de división del Ejército de Tierra, era el hombre designado por los conspiradores para ocupar la Presidencia del Gobierno. Su participación en el intento de golpe de Estado fue conocida en el momento de su destitución y arresto, cinco días después de la intentona golpista. Condenado a 30 años de cárcel por su participación en la intentona golpista y desposeído de su rango militar, fue indultado por razones de salud el 24 de diciembre de 1988, tras cumplir seis años de cárcel. JAIME MILANS DEL BOSCH (1915-1997). Capitán general de la III Región Militar, fue uno de los principales cabecillas de la intentona golpista al imponer el estado de excepción en Valencia y sacar los tanques a la calle la noche del 23-F. En junio de 1982, fue condenado por el Consejo Supremo de Justicia Militar a treinta años de cárcel y pérdida de empleo por un delito de rebelión militar. Puesto en libertad el 1 de julio de 1990, Milans del Bosch falleció el 26 de julio de 1997 y fue enterrado en la cripta del Alcázar de Toledo, por su condición de defensor del recinto durante la Guerra Civil. ANTONIO TEJERO MOLINA. Nació en 1932. Teniente coronel de la Guardia Civil, asaltó el Congreso de los Diputados el 23 de febrero de 1981 al frente de un grupo de agentes de este cuerpo y mantuvo secuestrado durante 18 horas al Gobierno y a los diputados. Sentenciado a 30 años de prisión por un delito de rebelión militar, fue el último de los condenados en salir de la cárcel, en la que permaneció quince años y nueve meses, la mayor parte en el castillo de Figueras (Gerona), del que era el único recluso. En la actualidad está retirado. Saber más
Teinteresa.es
El intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981 dejó muchos nombres propios para la historia. Muchos no tuvieron el peso que creyeron en los primeros minutos. Una gran parte de los 33 procesados han fallecido, pero muchos de ellos todavía viven para contarlo. El libro “23-F: la conjura de los necios”, es uno de los que mejor perfila a los protagonistas de aquella caótica etapa que pudo cambiar el curso de la historia reciente del país.

22 de febrero de 2020

Una historia de claroscuros

Mieres, semblanza de una centuria industrial y humana 

Tramo final de la vía en las cercanías de la estación del norte hacía 1920. Fuentes: Fernando Fernández Menéndez /Javier Fernández López (Revista de historia ferroviaria). EPOCA II - Número 12 - diciembre de 2009 - Página 7
“El mundo antiguo, un mundo silencioso y patriarcal que había durado miles de años, iba a terminar, y otro mundo, un mundo nuevo, ruidoso, industrial y traficante, se posesionaría de aquellas verdes praderas y de aquellas altas montañas”

Armando Palacio Valdés. (Entralgo, 1853 - Madrid, 1938) Escritor español. Tras pasar su infancia en Asturias, se estableció en Madrid a partir de 1870. (...).  Saber más… Biografías y Vidas.

Mayte Zapico
Estas palabras de las que ahora se cumplen 100 años, pertenecen a La aldea perdida de Armando Palacio Valdés, y nos podrían remitir a lo que fue el comienzo de una época para la historia de Mieres: una época de expansión económica, de luchas sociales, de conflictos personales y públicos, de guerra y de paz; una historia de claroscuros, donde la palabra pero también el silencio, la visión progresista pero también la intolerancia, lo mejor pero también lo peor del ser humano, escribieron páginas de letra muy apretada. El Concejo de Mieres, a finales del siglo XIX, comenzaba a alejarse de sus orígenes de villa itineraria y medieval. Como si de una metáfora se tratara, la capital, Mieres del Camino, crecía a espaldas de la Casa Fuerte de los Quirós, de la Casa Consistorial y del Camino Real o Carretera de Castilla; había tenido una historia muy rica pero constreñida a dos núcleos –la Villa y Oñón- intermediados por una vega feraz y ahora como una adolescente que pegara un estirón, fruto de las vitaminas de la industrialización, crecería hacia la vega arrancando terrenos al río, mirando de frente a las zonas donde se ubicaban explotaciones hulleras y siderúrgicas, donde se abría la línea férrea que desde Pola de Lena llegaba a Gijón; este tendido ferroviario se había inaugurado en 1874, sólo diez años antes de que se consiguiera salvar el Pajares, que abriría el mercado del carbón al interior del país.

21 de febrero de 2020

Los Ministros Asturianos en la historia

Una región sin cartera 

José del Campillo y Cossío (Alles, Peñamellera Alta, Asturias, 13 de febrero de 1693 - Madrid, 11 de abril de 1743). ministro de Hacienda, de la Guerra y de Marina e Indias con Felipe V. De Ramón - originally posted to Flickr as Ayuntamiento de Peñamellera Alta - WIKIPEDIA.

La reiterada ausencia de un ministro asturiano en los gobiernos de Zapatero acabo con una tradición de dos siglos
José Antonio de Canga-Argüelles y Cifuentes-Prada (Oviedo, 11 de julio de 1771-Madrid, 2 de diciembre de 1842). Ministro de Hacienda hasta 1821. Retratado por Antonio Cabana (Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Madrid). WIKIPEDIA
La Nueva España
En más de doscientos años de historia de España, Asturias ha tenido al menos 65 ministros, desde el reinado de Carlos IV (1788-1808) Asturias ha contado con presencia en los distintos gabinetes que desde entonces han dejado su huella en la historia española. De aquel reinado, el de la Ilustración y la invasión francesa, destaca la presencia en el gabinete del gijonés Gaspar Melchor de Jovellanos, que durante nueve meses (noviembre de 1797 a agosto de 1798) ejerció como ministro de Gracia y Justicia.

20 de febrero de 2020

Pintadas de la transición en Mieres

Todo un muro de las lamentaciones

El muro con pintadas del MCA en la calle Manuel Llaneza de Mieres. (LNE)
Las pintadas que el Movimiento Comunista de Asturias realizaba durante la Transición en la calle principal de la villa
Ilustración de Alfonso Zapico
Hoy se puede hablar del asunto, con naturalidad y vientos libres. En sus orígenes había que guardar ciertas formas por las consecuencias que podía aún traer el gesto de sinceridad. Y sin embargo era toda una demostración escaparatista del descontento ciudadano. Hoy no queda ningún rastro de aquel "grito" en el que se mezclaba el malestar colectivo con ciertas situaciones cotidianas y determinados lances políticos de tendencia más que izquierdista. Era todo un "muro de lamentaciones", en el enclave más que característico de la hoy llamada calle Manuel Llaneza, eje divisional y social del conjunto urbanístico de Mieres.

19 de febrero de 2020

La tradición del deporte de la canasta en el concejo mierense

Historia del baloncesto de Mieres
Mieres. Equipo de baloncesto del Caudal 1º división-(7-11-1954). (Archivo del Blog)
Como ocurriera en Estados Unidos, a finales del siglo XIX y en España, a principios del XX
Equipo de baloncesto de la Salle de Ujo en 1956. (Archivo del Blog)
https://elblogdeacebedo.blogspot.com/
El baloncesto aterrizó en Mieres en los años 50 del pasado siglo de la mano de los centros educativos más importantes de entonces, la mayoría de ellos religiosos (La Salle, Santiago Apóstol, Dominicas…) y de organizaciones de carácter formativo y juvenil, interesadas por incorporar nuevos deportes de equipo, modernos y alternativos a las actividades estrella del momento en aquel nuestro maltrecho país: el fútbol y el ciclismo eran, junto a los toros, o más a nivel regional, los bolos, el foco  donde forjaban la gloria los héroes más populares de entonces.

18 de febrero de 2020

La actriz norteamericana, Pearl White en el Salón Novedades de Mieres en junio de 1925

La Perla Blanca en Mieres
Foto: Postal Pearl White. Ver enlace… todocolección.

La Perla Blanca en Mieres Se llamaba Pearl White -Perla Blanca en castellano- y fue una estrella que llegó a brillar en el firmamento del cine mudo cuando soñar con las aventuras de la gran pantalla era para muchos la única forma de evadirse por unas horas de su realidad de trabajo y miseria
Ilustración de Alfonso Zapico. Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio, Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA.
La Nueva España
Nació el 4 de marzo de 1889 en USA, en un pueblecito de Missouri, pero como a la familia le quedaba pequeño se trasladaron muy pronto a Springfield, donde la pequeña casi no tuvo infancia porque a los 6 años abandonó la escuela para interpretar su primer papel en una representación teatral de «La cabaña del tío Tom», enseguida empezó a viajar, primero con una compañía ambulante y luego con un circo, donde aprendió a montar a caballo y a hacer acrobacias, que más tarde le servirían para poder intervenir en las escenas más peligrosas de sus películas sin necesidad de doble.Tuvo una breve relación matrimonial con el actor Victor Sutherland y en 1910 unos problemas de garganta afectaron su voz obligándola a dejar las tablas del teatro, pero como era bellísima no encontró problemas para pasar al mundo del cine, que todavía estaba lejos de conocer el sonido: primero la contrató una compañía de Nueva York y desde allí se catapultó a la plantilla de la mayor empresa mundial del momento, la Pathé Frères. 

15 de febrero de 2020

Jovellanos soñó con un país civilizado

Jovellanos, últimos días en la tormenta de una vida
Gaspar Melchor de Jovellanos. (LNE). https://www.lne.es/servicios/multimedia/imagenes.jsp?pRef=2013121100_99_1513021__Asturama-Jovellanos-ultimos-dias-tormenta-vida
En "Nuestros hijos volarán con el siglo" el novelista Juan Pedro Aparicio recrea, entre ficción y realidad, el viaje del político desde Gijón a Puerto de Vega y su dramático adiós
Ilustración de Alfonso Zapico

http://www.lne.es
Desde el pequeño muelle de Puerto de Vega hasta la casa de los Trelles hay apenas unos cientos de metros, en subida, a través de la calle Real y de la plaza de la Leña. Gaspar Melchor de Jovellanos los recorrió un día de noviembre de 1811, quién sabe si con la convicción íntima de que estaba protagonizando su último trayecto. Un hombre agotado, roto por los ocho días de navegación en medio de la tormenta a bordo de un cascarón a vela. Sobre todo, un hombre triste. Así lo perfila el escritor Juan Pedro Aparicio (León, 1941), autor de la novela "Nuestros hijos volarán con el siglo" en la que recrea esa singladura que a punto estuvo de acabar en naufragio, y el adiós de Jovellanos, la figura más importante de la Ilustración en España, lejos de su Gijón natal, pero con el Cantábrico como compañero.

14 de febrero de 2020

El carácter bondadoso e imparcial de Jovellanos

Lady Holland: retrato íntimo del Jovellanos anciano
Jovellanos, anciano, dibujo y litografía de Juan Cebrián. Litografía de J. Donon, Madrid. https://www.elcomercio.es/culturas/201507/20/cuando-corte-quiso-asesinar-20150720002052-v.html
El diario de la aristócrata, esposa de su gran amigo inglés, muestra al ilustrado asturiano como una persona de carácter bondadoso y sosegado, que sobrellevó con gran dignidad la persecución a la que lo sometió Godoy
Retrato de Lady Holland, cuyo diario personal refleja la vertiente íntima de Jovellanos. https://www.lne.es/asturama/2013/10/02/lady-holland-retrato-intimo-jovellanos/1477363.html
http://www.lne.es
«Es muy de destacar el carácter bondadoso e imparcial de Jovellanos, habida cuenta de tanto como ha padecido. Hay en él tal mezcla de dignidad y delicadeza, que sentir hacia su persona la más fuerte inclinación al afecto y la admiración es algo imposible de evitar. Contempla el afanoso escenario en que se ha visto precipitado con tranquilidad filosófica y, si viera el éxito de la causa que ha abrazado, gozará de la victoria sin exaltación triunfal; y si fracasa, está preparado para caer sin desaliento o sin hundirse en una abyecta desesperación».