Mujer astur, siglo I a.C. (Museo arqueológico de Asturias). Facebook. Ilustraciones Históricas. |
Una dieta cerealista, sin duda, pero no de forma exclusiva. En general, una dieta sana, aunque no lo suficientemente variada como para prevenir carencias. En algún momento de la Edad del Hierro, hacia el siglo III a. C., una familia astur podría haber comido un pote de habas que, cuidado, tiene poco que ver con el tradicional pote contemporáneo. Para empezar, las habas no son las alubias actuales, ni mucho menos las tradicionales fabes de la granja. Se trataría de una variedad de haba conocida como Vicia faba, una legumbre que crece en vaina, mucho más pequeña que les fabes actuales, pero muy nutritiva. Si había suerte, acompañada de algo de carne. Ese consumo de carne llegaría a través de dos caminos. Uno, el sacrificio de animales domésticos como corresponde a una sociedad sedentaria y de economía agropecuaria. Otro, el de la caza. Había amplia tradición cinegética, pero, además, masas muy frondosas de bosques cálidos donde la depredación de cérvidos, suidos y otras especies debe de haber sido relativamente sencilla.