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9 de noviembre de 2017

La afición de Oviedo a la ópera (II)

El teatro Campoamor y la ópera (1948-1989)
Mirella Freni y Luciano Pavarotti (a la derecha), en el teatro Campoamor en 1970
Luciano Pavarotti recibió una estruendosa ovación del público durante la interpretación de "Un ballo in maschera" en la temporada de 1978
El tenor lírico italiano, Luciano Pavarotti (1935-2007), en el año 1976
Como habíamos dicho en nuestro artículo de ayer, la Revolución de Octubre de 1934 dejó el teatro en ruinas. Tras la Guerra Civil, y con no pocos esfuerzos, se volvió a poner en pie totalmente remozado y con un piso más, reinaugurándose el 18 de septiembre de 1948 con la ópera "Manón" (Massenet), protagonizada por una jovencísima Victoria de los Ángeles, con el tenor Giacinto Prandelli y el barítono Manuel Ausensi de compañeros de reparto. La temporada, continuó con otras cinco óperas, "Aida" (Verdi) el día 19, "Lucía de Lammermoor" (Donizetti) el día 20, "La Boheme" (Puccini) el día 21, "Tosca" (Puccini) el día 23, y, por último, el día 24 "Rigoletto" (Verdi). Entre los cantantes que dieron vida a los principales personajes de estas obras nos encontramos, además de con los mencionados, con las sopranos Elisabetta Barbato, María de los Ángeles Morales y Lolita Torrento; las mezzosopranos Amalia Pini y Pina Ulisse; el joven tenor Mario del Mónaco; los barítonos Luigi Borgonovo y Carlo Tagliabue, y, por último, el bajo Antonio Campo, natural de Gijón y futuro padre de la cantante "pop" Marta Sánchez.
la soprano Elisabetta Barbato
En los años inmediatamente siguientes se mantiene la costumbre de los cinco o seis títulos y desfilan por la temporada nombres ilustres de la lírica como las sopranos María Luisa Nache y Virginia Zeani, el tenor Mario Filippeschi, los barítonos Ugo Savarese y Rolando Panerai, y el bajo Marco Stefanoni, alternando con otros menos ilustres y algún que otro de mediana valía. En 1952 ocurre el famoso episodio de la negativa de Mario Filippeschi a cantar el aria "Spirto gentil" de "La Favorita", alegando encontrarse mal de voz. Hay distintas versiones de lo que realmente pasó. Contaremos aquí una de ellas, la que nos parece mas probable, aunque conocemos alguna otra.
El tenor Mario Filippeschi
El caso es que no cantó dicha aria y, ante las protestas del público, parece ser que la terminó cantando antes de dar comienzo la escena final, obteniendo un espectacular éxito, convirtiéndose este hecho en uno de los mas conocidos dentro del anecdotario de las representaciones operísticas del Campoamor. En 1955 un grupo de aficionados que se hicieron llamar "Los Puritanos" (embrión de la famosa tertulia del mismo nombre, que tuvo notable peso dentro de la vida operística ovetense hasta bien entrado el siglo XXI), publica un artículo en la prensa criticando la gestión de las temporadas. El entonces Alcalde Ignacio Alonso de Nora toma en consideración dichas críticas y saca a concurso la adjudicación de la temporada, lo que provoca la dimisión de Julio Vallaure como Presidente de la Comisión Municipal de Ópera, el cual ya tenía medio apalabrada la temporada con el empresario Fabio Ronchi.
Gianni Poggi (Piacenza, 4 de octubre de 1921 - ibídem, 16 de diciembre de 1989)
El médico vasco Francisco Aguirresarobe se convirtió así en empresario del Campoamor, aunque en 1957, con la vuelta de Julio Vallaure a la Comisión Municipal, volvió Fabio Ronchi de empresario. Y por cierto con tres tenores de renombre: Gianni Poggi, Franco Corelli y Carlo Bergonzi. A partir de 1958 pasa a hacerse cargo de la temporada, por deseo del alcalde Valentín Masip, el agente artístico Arturo Barosi, presidente de la Asociación Empresarial de Roma, que ya se venía encargando de la organización de las temporadas de Bilbao. Y Barosi propone a Aguirresarobe que lo acompañe en la aventura, lo cual hará durante tres años, hasta su retirada. La temporada de 1958, en la que se dieron excepcionalmente 7 títulos, comenzó el día 19 con "El barbero de Sevilla", ópera con la que debutaron en Oviedo con gran éxito Gianna D´Angelo, Alfredo Kraus y Gino Bechi. Fue considerada la mejor desde 1948. Con Arturo Barosi y el entendimiento que se logró al año siguiente con la temporada de Bilbao, de la que también Barosi era agente, dio comienzo una larga y fructífera etapa que duró hasta dos años después de la muerte de este último, en 1982, encontrándose precisamente en Oviedo para asistir como solía hacer a la temporada. Durante estos años desfilaron por el Campoamor prácticamente todos los grandes, a excepción de María Callas y Giuseppe Di Stéfano que sí estuvieron a punto de venir para un concierto (que sí dieron en Bilbao).
El tenor español José Carreras
Hablamos, aparte de los ya citados, de Gianni Raimondi, Pedro Lavirgen, Jaime Aragall, José Carreras, Plácido Domingo y Luciano Pavarotti, entre los tenores; Montserrat Caballé, Renata Tebaldi, Leyla Gencer, Renata Scotto, Mirella Freni y Mariella Devia, entre las sopranos; Fiorenza Cossotto, Jean Madeira, Viórica Cortez y Elena Obratsova entre las mezzosopranos; Giuseppe Taddei, Cornell MacNeil, Piero Capucilli, Mateo Manuguerra y Renato Bruson, entre los barítonos, y Raffaele Arié, Enzo Dara, Bonaldo Giaiotti, Justino Díaz, Ferruccio Furlanetto y Nicola Zaccaria entre los bajos. Representaciones señeras de esta época fueron "Il pescatori di perle" de 1960, con Gianna D´Angelo y Alfredo Kraus, y el "Otello" de 1967, con Mario del Mónaco, que cantó sin saber que ya había muerto su padre, gravemente enfermo. La decisión de no darle la noticia hasta después de la representación fue de su mujer de acuerdo con Barosi. El "Elixir de amor" de 1970, protagonizado por Luciano Pavarotti y Mirella Freni, y "La hija del regimiento", protagonizada también por Pavarotti y Freni en 1972, fueron otras de las funciones que quedaron para el recuerdo.
El tenor Plácido Domingo
En 1977, el Ayuntamiento renuncia a la organización de las temporadas (al parecer medroso ante el proceso de democratización), e inmediatamente se crea la Asociación Asturiana de Amigos de la Opera por iniciativa de un grupo de aficionados comandados por el exalcalde Manuel Alvarez-Buylla. Se redactan unos estatutos, se abre el período de inscripción de socios y se convocan elecciones, lo que da lugar a una animada campaña en la que claramente se enfrentan dos posturas: la de los que consideran apropiado seguir manteniendo la colaboración con la ópera de Bilbao, procurando traer a los mejores cantantes del momento, liderada por Francisco Izquierdo Valdés, y la de los que consideran que es necesario un cambio de rumbo, cortando la relación con Bilbao, procurando una mayor atención a los aspectos escénicos y ampliando el repertorio a otros títulos no representados en el Campoamor, postura que defendía, entre otros, Ignacio Alvarez-Buylla Corujo. El 15 de diciembre de 1977 se celebran las elecciones y los resultados constituyeron un triunfo en toda la regla para la candidatura conservadora, pues sus siete integrantes, (el ya mentado Francisco Izquierdo Valdés, Teodoro López-Cuesta Egocheaga, José Ramón García-Conde Ceñal, Santiago Silva Mansilla, Eugenio Escobedo Bertrand, José Luis Sagarmínaga San Salvador del Valle y Alfonso Gómez G. Granda), fueron los siete mas votados, pasando a ser por tanto los componentes de la primera directiva, de la que fue presidente Francisco Izquierdo, vicepresidente José Ramón García-Conde, secretario Santiago Silva y tesorero Eugenio Escobedo.
La soprano Fefi Arregui
La primera temporada organizada por la Asociación Asturiana de Amigos de la Ópera tuvo un feliz desarrollo en el que colaboraron varios artistas e instituciones asturianas. Aparte de la Orquesta Sinfónica de Asturias, que ya lo venía haciendo, intervinieron la Capilla Polifónica Ciudad de Oviedo, la soprano Fefi Arregui, el registra Emilio Sagi y el Joven Ballet Contemporáneo de Oviedo, dirigido por Marisa Fanjul. La temporada se inauguró con "Luisa Miller", en la que intervinieron Montserrat Caballé, Luciano Pavarotti, Giorgio Zancanaro, Jane Jori, Bonaldo Giotti y Ferruccio Furlanetto, con dirección musical de Benito Lauret, por entonces titular de la Sinfónica. Pavarotti protagonizó también la segunda ópera de la temporada, "Un ballo in maschera", en la que arrebató al público con la corta estrofa del tercer acto que comienza con "Si, rivederti, Amelia?", por la que recibió una estruendosa ovación mientras la música enlazaba con el último cuadro, el del baile de máscaras. Por cierto, el director musical fue el prestigioso y veterano maestro Oliviero de Fabritis. Funciones redondas de aquellos primeros años de la asociación fueron el "Rigoletto" de 1981 con Mariella Devia, Mateo Manuguerra y Alfredo Kraus, a la que asistió el presidente Leopoldo Calvo Sotelo, y la "Carmen" de 1984, protagonizada por Elena Obratsova y José Carreras.
Alfredo Kraus
En general, fueron años muy buenos, hasta que a partir de 1985 el Ayuntamiento de Oviedo, siendo ya alcalde Antonio Masip, quiso intervenir en la organización de las temporadas. Con la excusa de las ayudas económicas que daba a la temporada, obligó prácticamente a la asociación a admitir varios de sus planteamientos, contratando compañías del Este cuyo peso vocal era claramente inferior al habitual en Oviedo. 
El acoso al que fue sometido Izquierdo y su directiva provocó que tras la temporada de 1988 manifestara su intención de dejar el cargo si había alguien dispuesto. José Ramón Gutiérrez Arias le pregunta si mantiene lo dicho, y ante la respuesta afirmativa se presenta como candidato, siendo proclamado Presidente en la asamblea celebrada en enero de 1989. Ante la falta de tiempo material para programar la temporada por parte de la nueva directiva se respeta la programada por la saliente y se lleva a efecto sin problemas gracias a la cordial colaboración entre salientes y entrantes.
La soprano Montserrat Caballé
FUENTE: CARLOS G. ABELEDO. Publicado por La Nueva España el 04-09-2017. Ver enlace.
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AUTORES.


José Carlos González Abeledo (Oviedo 1949). 
González Abeledo lleva varios años ejerciendo como crítico de ópera para LA NUEVA ESPAÑA en su faceta de colaborador especializado. Fuente: La Nueva España. Foto: Asociación lírica Asturiana.


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