Páginas

26 de abril de 2018

Manuel Meana Canal (Gijón, 1888–1958), durante años realizó acciones piadosas

"El Aldeanu", una institución en la ciudad

El Hotel Asturias de Gijón, en una captura de pantalla de la película "Volver a Empezar "de José Luis Garci. Oscar de Hollywood a la mejor película de habla no inglesa. Hotel Asturias

Manuel Meana Canal fundó el hotel Asturias y durante años repartió comida a diario a los mendigos, acción piadosa que en su testamento pidió que se mantuviera
Manuel Meana Canal de compras por Gijón en 1949. LNE
 Su muerte corrió como la pólvora, de boca en boca, por toda una ciudad que se iba entristeciendo poco a poco con la noticia. Era un día 15 de mayo de 1958 cuando, horas después de que los rusos mandasen al espacio a el satélite artificial Sputnik 3, una larga enfermedad hizo claudicar a Manuel Meana Canal, "El Aldeanu", a sus 71 años. Había muerto un hombre cordial, trabajador, sincero, auténtico, generoso, popular y muy querido en Gijón. "Una verdadera institución" que en ese momento lograba pasar, con nombre y apodo propio, a la historia de la ciudad por ser el fundador del oscarizado Hotel Asturias y por haber alimentado a los muchos hambrientos que la posguerra dejó en Gijón.

Manuel Meana, camino del hotel Asturias tras comprar en la plaza del Sur, junto al botones Manuel Peón, en 1949. LNE

Su historia se inició en la parroquia de Fano en 1888, de la que siempre se sintió muy orgulloso de pertenecer. Llegó muy joven a Gijón y pronto se le asignó el sobrenombre de "El Aldeanu". Abrió la taberna "El Diablo" en la zona del muelle, en un establecimiento muy próximo a la plaza del Marqués. Fue un chigre de éxito, pero poco tiempo después la vendió para enrolarse en otro negocio previo compra de una parcela en la plaza Mayor, donde hoy está el Hotel Asturias. 
La primera hospedería que dirigió Manuel Meana la bautizó como "El Laurel" -hoy se puede ver, mirando hacia arriba en recepción, la moldura de hojas de laurel que adorna el techo que recuerdan aquella época- y tenía sólo 15 habitaciones repartidas en dos plantas. Todo ello fue posible gracias al sustento económico de Baldomero Alonso, administrador del Conde de Revillagigedo. Todo iba como la seda hasta que estalló la Guerra Civil.

El “Aldeanu” entrega un plato de comida durante el reparto diario, acompañado de Luis Alfonso Gutiérrez, en 1942. LNE

Fue en julio de 1936 cuando Manuel Meana, un hombre notablemente religioso y significado políticamente hacia la derecha- acabó detenido. Durante su reclusión estuvo realizando trabajos forzados en El Musel hasta que un día llegó la orden de que le fusilasen. Pero el destino le tenía otro guion preparado y logró librarse de la ejecución en el último suspiro, haciendo bueno el refrán de que uno recoge lo que siembra. Quien intervino para salvarle la vida no fue otro que el responsable de la prisión. Era un muchacho al que años atrás había sorprendido robando en su hotel y le preguntó el porqué de su acción. Aquel joven le dijo que por hambre. Ante esa respuesta "El Aldeanu" declinó alertar a las autoridades. Ese gesto le salvó la vida.

José Luis Garci rodando Volver a empezar en la Plaza Mayor de Gijón. (Archivo fundación AGR)

Pero no fue el único donde demostró su solidaridad con el necesitado como demostró al comprobar los efectos que la contienda había dejado entre numerosas familias de la ciudad. Cada día, sobre las dos del mediodía, muchos eran los que hacían fila a la puerta del hotel. Allí salía puntualmente Manuel Meana, acompañado por alguno de sus empleados, para dar de comer a los necesitados, liderados por "La Perala", que se encargaba de contar platos y cubiertos al terminar. Una práctica que "El Aldeanu" comenzó tras el funeral de su esposa, al que acudieron varios mendigos a darle el pésame para sobrellevar mejor el luto. Incluso, dejó escrito en su testamento que el rito se siguiese llevando a cabo a pesar de su muerte.
PLAZA MAYOR AYUNTAMIENTO, el hotel Asturias a la izquierda. (todocolección)
Las crónicas de la época le definían como "un perfecto caballero, católico de sentimientos bien afincados; un español que jamás renunció a sus ideas y que tuvo la valentía de proclamar sus convicciones en las circunstancias más difíciles". Con esa carta de presentación se dejaba ver diariamente por la ciudad, dando muestra de que era trabajador. Siempre acudía él en persona a comprar la mercancía en la plaza del Sur. Allí reñía con las campesinas del concejo o bien por el precio o bien por la calidad del producto. Luego, en compañía de algún pinche llevaba las viandas que se servirían ese día. Alguno quedará en Gijón que le recuerde todavía hoy con dos pollos en la mano por la calle Corrida seguido de un carro con verduras y mantecas.
Tráiler de la película "Volver a empezar." La Ciudad de Gijón al Comienzo de la Película. Hotel Asturias
Otra de sus anécdotas que perdura en Gijón se produjo merced a la incorporación de mobiliario francés para los aseos. Al final de la cadena de la cisterna en una empuñadura de porcelana estaba escrita la palabra "tirez", es decir, "tire usted" pero pocos o nadie lo hacían. De ahí que colgase un cartel en el baño que ponía "tirad del tirez". Tal fue su contribución a la historia de la city que hasta el Ayuntamiento -tras acuerdo ratificado el 9 de octubre de 2001- estimó oportuno darle su nombre a una calle situada en el polígono industrial de Somonte, con entrada por el Río Pinzales y salida por la calle de María González, "La Pondala". Otra mítica.
El botones Manuel Peón, en 1949. (LNE)
FUENTE: IGNACIO PELÁEZ. Publicado por La Nueva España el 25-03-2018. Ver enlace.
_______________________________________________________________________________
AUTORES.


Ignacio Peláez (Gijón, 1990)
, periodista de LA NUEVA ESPAÑA, crítico taurino del periódico y escritor. Antes de su asentamiento profesional en Gijón había trabajado en la Radio Televisión de Castilla-La Mancha. ASOCIACIÓN DE ANTIGUOS ALUMNOS. COLEGIOINMACULADA DE GIJÓN

EL BLOG DE ACEBEDO
 (Antología de Historia). La Historia es una disciplina académica que aspira a comprender el pasado y la forma en que se ha configurado el presente. Es necesaria para entender, para cambiar y para saber cómo ha llegado a existir la sociedad en la que vivimos.

“El único deber que tenemos con la historia es reescribirla”. (Oscar Wilde)

El Blog de Acebedo se adentra en la historia de nuestra tierra, TODO SOBRE ASTURIAS, MIERES Y CONCEJO. navegar en este blog, es conocernos mejor a nosotros mismos y nuestra dilatada historia. Como decía el poeta mierense Teodoro Cuesta García-Ruiz (09/11/1829 – 01/02/1895), “soy d´esa villa y á honra tengo haber nacío nella”

_______________________________________________________________________
_______________________________________________________________________

NOTA: Los nombres de los autores aparecen en el pie de cada imagen o al final de cada artículo, si no es así, se debe a que es un dato que se desconoce, así que, si algún autor la ve en este blog, le rogamos que se ponga en contacto con El Blog de Acebedo para hacerlo figurar o para borrarla si es su deseo, porque es justo reconocer a los autores.

Si te ha interesado esta entrada y quieres preguntar, comentar o aportar algo al respecto, puedes dejar un comentario o escribir a mi dirección de correo del blog con la seguridad de ser prontamente atendido.

¡¡¡Difunde El blog de Acebedo entre tus amistades!!!

Sígueme en:

© - Facebook - Roberto Cortina

© - Twitter - El blog de Acebedo

© - El Blog de Acebedo

No hay comentarios:

Publicar un comentario